La Cueva de Nerja puede ser la próxima estación donde el director Javier Trueba se adentre en las últimas investigaciones científicas, esta vez acerca de las conexiones del Homo Neanderthalensis y unas pinturas rupestres que, como apuntan algunos estudiosos, se les pueden atribuir a los individuos que habitaron el interior de esta gruta situada casi en el límite litoral entre las provincias de Málaga y Granada.

Trueba, después de la presentación del ciclo científico que la Fundación de la Cueva coordina con la Fundación Descubre y la entidad financiera Unicaja -hasta el 31 de marzo se desarrolla en el interior del Museo de Nerja-, visitó las diferentes salas donde se exponen desde diciembre algunas de las reliquias localizadas en los últimos 50 años dentro de la cavidad. La directora del propio espacio museístico del casco histórico nerjeño, Cristina Liñán, mostró al cineasta las nuevas teorías que se desprenden de la datación en Miami de determinados restos de las pinturas rupestres nerjeñas.

La Fundación de la Cueva confirmó a finales de enero que de los últimos análisis «se podría establecer por primera vez en la historia» un vínculo entre unas pinturas y el Hombre de Neandertal. No obstante, los responsables del comité científico de la gruta van a solicitar un nuevo análisis, en un segundo país, con la intención de «confirmar» estas hipótesis.

Javier Trueba se mostró interesado en ahondar en estas últimas posibilidades que brinda la cavidad nerjeña y reconoció haber recorrido multitud de cuevas a lo largo de la Cornisa cantábrica. Además explicó el procedimiento seguido hasta diseñar el documental que ayer presentaba en Nerja, El misterio de los cristales gigantes. La trama gira alrededor de un profesor del CSIC, director del Laboratorio de Estudios Cristalográficos de Granada, Juan Manuel García Ruiz, que hallará en una cueva de México «el maravilloso mundo de los cristales, su ciencia y su belleza, hasta desvelar el misterio que esconde su formación».

Cristina Liñán, acompañada por el gerente de la Fundación, Ángel Ruiz, y el edil de Turismo, Bernardo Pozuelo (PP), subrayó la necesidad de acercar la ciencia a la comunidad educativa local, a través de un ciclo de cine como éste. «El objetivo es servir como puente para la difusión al conjunto de la sociedad de los avances científicos y tecnológicos, fomentando el interés y sensibilización de la ciudadanía».