Me piden que escriba sobre la tendencia del flamenquito en directo, tal se ha puesto de moda en las salas y bares de copas, tanto del Centro como de las barriadas. Si hablamos de la capital, cómo no existe ningún tablao, no podemos hablar más que de lo que hay. Locales con música rociera, con grupo cantando temas propios o versiones, pero que atrae y llena la sala. Y el flamenquito, que no es otra cosa que una forma de llegar a los jóvenes, sobre todo a este público. Eso no quita que ese grupo formado normalmente por tres personas, cantaor/a, guitarrista y bailaor/a o un cajón, sepan por igual interpretar una malagueña o seguiriya, vamos que conocen la raíz. No pienso que sea perjudicial para la salud del flamenco, incluso de todo se obtiene lo positivo. Crea trabajo, actuar en directo, espacios abiertos€

Para los que amamos el flamenco y dejamos hacer, lo importante es saber qué queremos escuchar, porque para ver flamenco en directo hay lugares en la ciudad. En la Málaga actual, el flamenco debe ser más visible. Son muchísimos los visitantes que quieren descubrir el flamenco. El flamenco y Málaga es un sello vitalicio. Cantes, artistas, lugares, poeta... La historia así ha quedado escrita. Málaga Cantaora, pregonera y marenga. Cafés cantantes, tablaos, tabernas, que han quedado en los libros y que esperemos resurjan.