Podría decirse, y de hecho así lo dijo Luis Alegre, que Jordi Évole «es el Leo Messi del periodismo». Las colas en la puerta del auditorio Edgar Neville de la Diputación, donde ayer acudió para protagonizar la cuarta entrega del ciclo Palabras Mayores -organizado por La Térmica-, y la cantidad de medios que congregados en la rueda de prensa anterior al acto atestiguaban la enorme expectación que despierta el conductor del programa Salvados. Tanta que incluso algunas personas no pudieron acceder al auditorio, que se llenó hasta la bandera.

Évole confesó sentirse halagado por las frases de agradecimiento del presidente de la entidad supramunicipal, Elías Bendodo -«Es la primera vez que un presidente de una diputación me presenta con palabras cariñosas», dijo-, aunque a los pocos minutos no dudó en asegurar que «antes de tocar Sanidad o Educación» empezaría por «adelgazar las diputaciones», a las que calificó como «las instituciones más prescindibles de las que tenemos». El periodista de Cornellá habló de todos los aspectos de la profesión informativa, desde la presión de los poderes a la estrategia de los medios o la dificultad que a veces presentan algunas entrevistas o entrevistados.

Aunque, sobre todo, quiso dignificar la labor periodística y su función. «Vivimos un momento mágico para el periodismo por el movimiento ciudadano que hay y su demanda informativa: el ciudadano tiene ganas de saber», señaló, recordando que desde la Transición no se produce tal demanda. Igualmente, el Follonero opinó que el periodismo que se realiza en España es bastante crítico y que gracias a la prensa «se han conocido casos que de otra forma no hubiéramos sabido». Las nuevas tecnologías también entraron a debate y Évole aseguró que «el todo gratis» que practican la mayoría de los medios en internet ha perjudicado a la profesión: «Hemos convertido el periodismo en algo gratuito y creo que debemos poner en valor lo que hacemos. Cierta descostumbre al todo gratis en prensa no sería nada malo», recalcó.

@jesuszotano