La primera edición de Cinema Boquerón, una muestra que busca radiografiar la salud del cine local contemporáneo, estrenará el jueves el tráiler de una esperada ópera prima, la del valenciano afincado en nuestra ciudad Fran Kapilla, bajo el título de Las hijas de Danao; un thriller ambientado en el París de los disturbios del 2005 -a raíz de la muerte de varios musulmanes mientras escapaban de la policía-, ambiente contrapuesto al glamour del mundo de la ópera, uno de los grandes atractivos de esta cinta, cuyo rodaje comenzó a finales de 2011.

«Ha sido un sacrificio enorme», reflexiona ahora Kapilla, convencido de tener en sus manos «un largometraje ambicioso y de gran factura visual». Y tiene claro el porqué: «Teníamos un presupuesto muy limitado, que no ha venido de ninguna financiación pública ni de ninguna productora sino de tres mecenas que creyeron en este guión al cien por cien. Aparte de eso el equipo ha realizado un esfuerzo colectivo a lo largo de un año sin parar; porque yo por ejemplo no he descansado ni un solo día en todo este año, ni vacaciones, ni fiestas, ni domingos y hemos demostrado que era difícil pero no imposible». Han sido 42 jornadas de intenso rodaje, entre París y Málaga -el Teatro Cervantes es, por ejemplo, un escenario importante en la trama-, a lo largo del tiempo: la primera claqueta fue en noviembre de 2011, se retomó el trabajo en enero del 2012 y se finalizó el año pasado. Imagínense el trabajo concienzudo de continuidad para que el espectador no termine notando en la gran pantalla este rodaje discontinuo, con parones. Beatriz Rico, Mónica Aragón, Paco Roma, Susana Paw y Fran Millán componen el elenco actoral de la cinta, que, además, cuenta con un invitado muy especial: el pintor Antonio Montiel, en el papel del director de orquesta.

Las hijas de Danao nos traslada al París de 2005, donde, durante los ensayos de una gran ópera, una conocida soprano recibe una amenaza anónima. Coincidiendo con graves disturbios en la capital gala, intentarán resolver el misterio dos detectives singulares que se internarán en un mundo lleno de glamour, sordidez y personajes enigmáticos. «La idea de la película surgió cuando me hallaba leyendo todos los libros de Sherlock Holmes y la mayoría de Maigret, porque quería empaparme del misterio clásico. Y el detonante fueron las manifestaciones del 15M: la idea de que dos mundos coexisten, una banda de manifestantes urbanos y un mundo elegante y sofisticado como la ópera me impulsó a escribir el guión», asegura Kapilla, que ha participado en once cortometrajes, como las piezas de la Trilogía del Muro.

La carrera del director independiente no tiene cuestas hacia abajo; tras el esfuerzo titánico del rodaje, toca ahora la heroicidad de la distribución. «No es un cortometraje ni por duración ni por calidad; pero tampoco es una superproducción donde intervienen intereses comerciales muy férreos. Va a ser difícil hacerse un hueco con este producto en España. Aquí el cine de autor siempre se han entendido muy poco en producciones millonarias, pues imagínate en esta nuestra que está realizada con medios más artesanales...». Kapilla, de momento, ya tiene claro que Las hijas de Danao se va a ver en muchos festivales.