­­El de hoy será su tercer concierto después de haber sido madre de Alma, su recién nacida primera hija. Pasión Vega acude hoy al Cervantes junto a los pianistas malagueños Víctor y Luis del Valle. Los tres protagonizan Dos pianos con Pasión. Cartas desde Nueva York, un recital muy teatral donde la tradición cultural española se une a la herencia musical de ambos lados del Atlántico.

Hace poco más de un mes que dio a luz. ¿Ha significado un cambio en su forma de cantar el hecho de ser madre?

Claro, sobre todo sensitivamente hablando. Evidentemente, todo te cambia, no solamente el cuerpo sino también tus prioridades en la vida. Lo que antes te ponía muy nerviosa o te estresaba mucho, ahora lo hace menos. Dedicas mucha energía a cuidar a tu bebé y todo lo demás parece pasar a un segundo plano, excepto, por supuesto, mi profesión, que está muy presente y la cuido muchísimo. Pero, la verdad, ahora me estreso menos.

Y continuando con los cambios. Este espectáculo muestra una faceta desconocida.

Hay un cambio de registros interpretativos y en registros vocales. Son canciones y estilos muy diferente a los que hago habitualmente. Y eso requiere de un esfuerzo diferente para encontrar una estética nueva, distinta. Además de la intensidad que requiere cada letra de cada canción, se trata de un concierto con argumento. Como una pequeña obra de teatro musical en la que los hermanos del Valle y yo dialogamos, conversamos e intentamos resolver un misterio a través de las pistas que encontramos en un baúl. Es un espectáculo muy divertido y lúdico con un repertorio repleto de joyas.

Un repertorio en el que confluyen jazz, fado, tango... ¿Se ve en un futuro introduciéndose en estos géneros?

Bueno, para que veaa, el toque jazz en esta función está en la interpretación que hago de Y sin embargo te quiero. Esta fusión de estilos es lo que me gusta y me caracteriza. No descarto esa posibilidad, pero creo que lo que mejor me define es que soy una cantante española, aunque en alguna ocasión haya cantado en inglés u otros idiomas.

También coquetea aquí con la interpretación. ¿Se ve convertida un en una actriz de teatro o de cine?

Lo importante no es que se vea una sino que te vean los demás. Yo estudié en la Escuela Superior de Arte Dramático de Málaga y allí me di cuenta de que no soy nada buena actriz. Pero no cuando tengo que interpretar o expresar a través de mis canciones.

Lorca y Falla, dos grandes pilares de la cultura española, están muy presentes en este montaje. ¿Cree que es importante reivindicar y difundir nuestra cultura?

Es fundamental. Aunque nos parezca increíble, hay mucha gente que acude al teatro a vernos y no conocen las canciones populares de Falla, por ejemplo. Mucha gente se nos acercan a preguntarnos. Y es curioso, porque en la Nana o la Jota de Falla es la raíz de nuestra copla. Rafael de León bebió de estas fuentes, de Lorca y Falla.

La cultura en España no vive sus mejores momentos. ¿Lo siente así?

La verdad es que sí: lo siento así. Realmente, la cultura está siendo muy castigada por nuestras autoridades. Y también un poco por el público. Me preocupa que esos jóvenes que se bajan con tanta facilidad música y películas de internet lo sigan haciendo y haciendo creer a las nuevas generaciones que la cultura y el arte no cuestan nada. La cultura nos abre la mente y nos enseña muchas cosas. Por eso deberíamos cuidarla muchísimo más. Además, el 21% de IVA nos ha destrozado a todos. Sin cultura seríamos una sociedad adormecida y a la espera de verlas venir. Y creo que deberíamos tomar conciencia de que somos nosotros los que tenemos que elegir qué futuro queremos para nuestro país. Tenemos mucha más voz y más voto del que pensamos. De hecho, lo tenemos todo: nosotros podemos decidir qué política, qué cultura y qué economía queremos tener. Si todos nos tiramos a la calle, quién nos puede parar.

¿Qué puede adelantarnos de su próximo trabajo?

Pues que ya estoy preparando mi próximo disco, que espero que salga a finales de año o a lo largo del primer trimestre del 2015. Estoy muy ilusionada y eligiendo las canciones. También buscando nuevos compositores, porque hay mucha gente con mucho talento. Voy de la mano de Fernando Velasco, un productor y compositor muy especial que me va a ayudar a hacer un disco único; que signifique un antes y un después en mi carrera.

La unión de su voz y la música de Velasco ya la pudimos conocer en la banda sonora de 321 días en Míchigan, estrenada en el pasado Festival de Málaga Cine Español.

Sí, Gracias a Enrique García [director de 321 días en Míchigan] pude conocer a Fernando Velasco el año pasado. A partir de ahí ha surgido una muy buena conexión con él. Velasco es uno de los grandes talentos que tenemos en este país.