­Ayer se presentaron en La Térmica las actividades paralelas de uno de los festivales más esperados en la capital: el 101 Sun Festival. La iniciativa privada, capitaneada por Planet Events, Grupo Mundo y la promotora granadina Musiserv, tendrá un coste aproximado de un millón de euros, del cual el Consistorio aporta unos 15.000 euros.

«La intención es que la marca 101 Sun Festival se consolide como lo hizo en su día la del FIB», aseguró Jorge Cambronero, director de la promotora Planet Events, que cree que en torno a «11.000 y 12.000 personas» se darán cita en el Estadio de Atletismo de Málaga.

Se pretende que sea una cita muy especial. «Cruzcampo quiere sacar el festival a la calle», subrayó Ada Bernal, la sponsoring manager del principal patrocinador de la cita musical. La aportación económica de esta empresa ha hecho posible que desde el martes se organicen conciertos itinerarios que han pasado por los principales paseos marítimos de la ciudad. Hoy es último día para disfrutar de los directos de Marto, Tarifa Plana, Miss Irina, Gaula y Glaciar. Desde las 12.00 hasta las 15.00 horas el concierto sobre ruedas hará parada en el Paseo Marítimo de la Malagueta hasta llegar a la explanada de El Corte Inglés a las 19.00 horas, donde las bandas repetirán los directos.

La marca cervecera aprovecha el tirón de las redes sociales. Durante estos días se organizará el concurso #brindoporelSun, en el que la gente deberá subir una foto acompañada del hashtag. El ganador tendrá a su disposición una caravana cinco estrellas equipada con todo lo necesario (cervezas, abonos VIP, iPod con música) durante el fin de semana. Además, tampoco se olvidan de los más fans: los asistentes que se atrevan a mandar una foto suya durante los conciertos con el hashtag #Cruzcampomecuela podrán ganar un pase VIP para ver los directos desde la primera fila.

Una nueva muestra para un nuevo festival

El festival organiza, paralelamente a los contenidos musicales, una exposición fotográfica, titulada «Disparos en los 80», de la mano de Mariví Ibarrola, mítica fotoperiodista que retrató con su cámara Nikormat una década de efervescencia musical y artística en Madrid, Granada, Vitoria, San Sebastián, Guernica y otros lugares del centro y la periferia. Una mirada underground de la movida de los años 80.