­Nació en 1965 en Madrid. Estudió Filología Clásica en la Universidad Complutense de Madrid, es Máster en Guión Cinematográfico por dicha universidad y perfeccionó sus estudios en el American Film Institute de Los Ángeles. Ayer participó en los cursos de verano de la UMA en Archidona, en una conferencia sobre Adaptaciones literarias: el mediador entre dos idiomas.

¿Cuál es la descripción que puede hacer en la actualidad del cine español?

Hay una tendencia natural: la caída de la asistencia de los espectadores en a las salas de cine. Estamos en un momento en el que nuestra forma de vida ha cambiado y nuestro modo de ocio también. Además se suma que estamos en un camino tecnológico. El problemas es que se está produciendo una especie de monocultivo. Que vemos muy pocas películas de distribución en nuestro país. España se está convirtiendo en un país poco rentable para el cine internacional al que llegan cada vez menos películas.

¿Puede ser el principal hándicap la financiación?

Puede ser. Pero, por ejemplo, el IVA cultural es sólo un elemento más que afecta a la industria cinematográfica, aunque el IVA cultural es un elemento bastante inútil e innecesario, que ha afectado al cine, pero también ha afectado mucho al teatro. Es un elemento más que añade la crisis.

¿Qué diferencia hay de ver el cine desde el Ministerio de Cultura a verlo detrás de las cámaras?

Hay una diferencia enorme, cuando uno es creador y está dirigiendo o escribiendo no se tiene en cuenta el análisis del mercado porque eso te paralizaría. Son casi posiciones antitéticas, una es la de gestión y la administración o la defensa y la protección de la cultura, y otra es la del creador que hace una reflexión distinta.

¿Le quedaron cosas por hacer tras salir del Ministerio?

Muchísimas. Me hubiera encantado ver terminadas las obras del Palacio de la Aduana en Málaga, que no he podido visitar una vez que se han completado. Además de todo lo que tiene que ver con patrimonio, con arqueología, con rehabilitación de edificios o equipamientos culturales, que necesitan un empujón.

¿En qué trabaja actualmente?

Ahora estoy escribiendo cuentos infantiles y una novela.

¿Cómo ve el mercado de la piratería?

Es una economía sumergida, paralela, un mercado negro, que no genera beneficios y que es una competencia desleal con quien tiene un videoclub online legal y ágil. La piratería impide el desarrollo de la industria del cine.

¿Hacia donde cree que se dirige el mercado del cine en internet?

Internet es una oportunidad de difusión única. Pero hay que encontrar la manera de que permita que la gente pueda vivir de la cultura.

@_rocioluque