«Rendir tributo al flamenco de siempre con la frescura del flamenco de ahora». Esta es la idea principal con la que Sergio Aranda presenta su nuevo espectáculo, Enjundia flamenca, montaje con el que regresa a su Málaga natal tras varios años llevando su arte por diversos rincones del mundo.

El escenario del Auditorio Edgar Neville (calle Pacífico) será testigo, el próximo sábado, 9 de mayo, de este sentido homenaje que realiza el bailaor a los palos flamencos que siempre le han «apasionado»: tangos dedicados a Málaga, martinete, malagueñas y abandolaos, cantiñas, fandandos y soleá. Para Aranda, Enjundia flamenca supone un retorno a las fuentes donde excede su técnica perfecta para conseguir el brillo del flamenco.

«La influencia de tu niñez, la fase personal de tu vida, la fuerza, la constancia, el sacrificio, el entusiasmo, incluso los obstáculos que te puso la vida, hacen que necesites volver a la enjundia del flamenco, al motivo real de tu baile que, con la fuerza de ser contada, se repitió tantas veces que se volvió realidad».

Sobre el escenario, Aranda estará acompañado por la bailaora Irene La Sentío; El Pechuguita, Antonio El Canito e Ismael de la Rosa El Bola al cante y las palmas, y el guitarrista Francisco Vinuesa, que también es responsable de la dirección musical. El bailaor malagueño dio el salto al mundo del arte jondo en la primera Bienal de Flamenco de Málaga, consiguiendo un gran éxito que le abrió el camino a esta gran carrera profesional. Se ha formado con maestros como Luci Montes, Manolete, Antonio Canales, Eva La Yerbabuena y Farruquito. Ha viajado por todo el mundo llevando su baile y a Málaga por bandera, (Japón, EEUU, Marruecos, Alemania, Shangai como solista y con la compañía de María Juncal, El Güito, Daniel Casares y Miguel Marín). También ha dejado huella en los emblemáticos tablaos de Madrid, donde reside actualmente, Barcelona y Sevilla. Ha dirigido varios espectáculos, como Pasito a Paso y Málaga baila y Sevilla canta, con la colaboración especial de Isabel Fallos. Actualmente, dirige y es coreógrafo de su propia compañía de flamenco.