José Jiménez Fernández, Joselito, como superhéroe de Marvel, dibujado al estilo del manga japonés, las historietas de Bruguera, el cómic franco-belga, las revistas femeninas de los 60 y 70, la estética psicodélica e incluso con los trazos simples de Tono, el humorista de La Codorniz. El dibujante José Pablo García (Málaga, 1982) ha recreado en Las Aventuras de Joselito (Reino de Cordelia) la vida del niño prodigio español por excelencia y de paso homenajea en cada capítulo a los mejores dibujantes del pasado. El ambicioso reto le ha valido, por ahora, el lanzamiento de una segunda edición en sólo una semana desde que la obra llegó a las librerías de toda España.

«La decisión de hacer un episodio en cada estilo viene porque la vida de Joselito se prestaba a eso, era la única forma de contarla bien», cuenta el dibujante, que explica que sus padres, Alfonso y Pilar, son grandes seguidores de Joselito, «sobre todo mi madre», apunta. Por eso, José Pablo ha crecido con la compañía de los discos de El niño de la voz de oro, aunque asegura que sólo ha visto completa la película Aventuras de Joselito en América.

«Desde siempre he tenido una fascinación por el personaje y un día di con el libro de sus memorias», explica. Allí pudo comprobar cómo el ruiseñor de Jaén (nació en Beas de Segura en 1942), además de ídolo en España y países tan dispares como Francia, Japón o Israel, fue recibido por el presidente Lyndon B. Johnson de Estados Unidos, por el papa Juan XXIII, conoció a Frank Sinatra, al Ché Guevara en plena revolución cubana, cazó para la guerrilla en Angola, entró en la cárcel, revivió de las cenizas... Por eso mismo, cada momento de su vida, subraya, merecía ser tratado como un aventura de Corto Maltés, un regreso al expresionismo o incluso evocar una página de El Jueves, algunos de los estilos homenajeados por el dibujante malagueño.

La obra viene además prologada por otro admirador de Joselito, el presentador de televisión Jorge Javier Vázquez, que resalta la repercursión internacional del artista en España y medio mundo, «algo reservado exclusivamente a las grandes estrellas». Por el eco que está teniendo la obra y el interés que ha mostrado Jorge Javier Vázquez, el dibujante dice sentirse «feliz y abrumado» y subraya que el libro «está hecho con muchísimo cariño y sobre todo al final de la obra se ve la adoración que siento por Joselito». José Pablo, que no conoce al antiguo niño prodigio, confía en poder conocerlo algún día, «aparte de que es una persona que no se toma en serio a sí misma y tiene mucho sentido del humor».

El ilustrador y dibujante acaba de terminar un cómic sobre Los primeros de Filipinas, los exploradores españoles del Pacífico. ¿Volverá a dibujar las vidas de niños prodigio? «Si me lo propone Marisol, pues sí», sonríe.