­La Lupi ha dejado este lunes su huella en el Teatro Cervantes de Málaga capital. En concreto, la artista ha dejado impresa la marca de sus pies en el escenario, donde acompañó con su baile a grandes como Miguel Poveda, y la huella de sus manos con pintura indeleble en la tercera planta. Así, Susana Lupiáñez, o La Lupi, presentó su regreso al Cervantes con la raigambre, originalidad y calidad de su sentido homenaje a Pastora Imperio, una pieza dirigida por Ángel Rojas en la que no se deja de ver baile flamenco pero que a la vez narra una historia, la de la vida de la inmensa artista sevillana, una mujer «que bailaba como vivía», explicó La Lupi.

La compañía flamenca de la bailaora malagueña repondrá este martes en el ciclo de Terral 2015 Alrededor del flamenco, a partir de las 21.00 horas, Cartas a Pastora, una coreografía que obtuvo un rotundo éxito en su estreno en el Teatro Echegaray en abril de 2014, con tres llenos consecutivos; viajó al Piccolo Teatro de Milán; saltó el pasado septiembre a las tablas del Cervantes, de nuevo agotando el papel, y se acaba de ver en el Teatro Fernán Gómez en el marco del festival Flamenco Madrid 2015.

«Imitar a Pastora habría sido una aberración total», confesó La Lupi sobre un espectáculo que narra la historia de un mito del flamenco. El objetivo es homenajear la esencia de una gran artista, pero sin tratar de copiarla. El baile temperamental de La Lupi, muy flamenco y técnico y a la vez cargado de una gestualidad contemporánea, cuenta con el acompañamiento al cante de El Pulga y Antonio Campos y por la guitarra y dirección musical de Curro de María.