Después de los éxitos absolutos de convocatoria y de resultados artísticos de sus dos primeras citas, las correspondientes a Robert Glasper y Richard Bona, el Portón del Jazz de Alhaurín de la Torre afronta hoy otra de sus citas imperdibles con la comparecencia del bajista Marcus Miller.

Miller es, desde los 70, no sólo uno de los mejores bajistas del mundo, uno de los grandes del slap, sino también un arquitecto definitivo del jazz fusión. Despegó siendo el sideman del discutido Miles Davis de los años 80, el más pop, y a partir de ahí inició una carrera en solitario muchas veces más vinculada al funk y el R&B que al propio jazz, con un buen puñado de bandas sonoras a sus espaldas.

Pero Miller no vive de glorias pasadas: viene a presentarnos Afrodeezia (Blue Note), su más reciente álbum y que curiosamente cuenta entre su nómina de colaboradores a Robert Glasper. El disco es una exploración por los ritmos del mundo tamizados por el jazz, con las sonoridades africanas como gran punto de partida porque a partir de ahí hablamos de una diáspora de texturas y géneros: hay, cómo no, rhythm n´ blues, fundamental en la trayectoria de Marcus Miller, y también hip hop, con la participación al micro del miembro de Public Enemy Chuck D.