­Los setenta relampaguean en Roger Hodgson: pantalones negros de pitillo y camisa blanca tejana. Melena gris jesucrística sobre los hombros. El tiempo no ha pasado por él ni tampoco por el repertorio que levantó junto a Rick Davies, en Supertramp, y del que dará buena cuenta esta noche en el Festival Starlite. Acompañado de cuatro músicos de aúpa, el repertorio no es otro que el de las canciones que cantó y escribió para Supertramp: The Logical Song, Give a Little Bit, It´s Raining Again, Take the Long Way Home, Dreamer o Breakfast in America, entre otras. Canciones que supieron llevar la música progresiva a terrenos más asequibles, gracias a las melodías adictivas de Hodgson, y una garganta muy peculiar, que potenciaba la singularidad de las canciones.

De hecho, para muchos Supertramp es Roger Hodgson. Y los conciertos de éste son, en realidad, como si fueran los de la propia band. «Será un concierto de Supertramp pero sin el nombre de Supertramp», aclara el también compositor británico.

Consciente de que no puede pasear el nombre de la banda por el mundo tras llegar a un acuerdo verbal con el otro fundador de la misma, Rick Davies, el artista lleva años tocando en lugares más pequeños, «donde se produce una magia especial con el público y siempre hay sorpresas». Hablamos con Roger Hodgson, un orfebre del pop de todos los tiempos. Y lo hacemos antes de que su archienemigo, Rick Davies, haya suspendido la gira de Supertramp (más información en la pieza de la derecha).

¿Cuántas veces le han preguntado sobre el regreso de Supertramp?

¡Siguen siendo muchas!

Anote una más: ¿hay alguna posibilidad de reconciliación?

En 2010, porque sabía lo mucho que los fans lo deseaban, hice una oferta a Rick Davies y su agente para unirme con él en algunos conciertos especiales para la gira de los 40 años, pero Rick se negó. Así que creo que el tiempo de una reunión ha pasado y no creo que sería la misma magia hoy. Supertramp fue una gran banda de los setenta. Hoy es sólo una marca que Rick y su esposa poseen y utilizan para salir de gira. Yo disfruto de lo que hago, recorriendo el mundo y conectando con fans que tienen una relación profunda con mis canciones. Este es para mí el verdadero reencuentro.

¿Cómo es su relación con Davies y el resto de miembros de Supertramp?

Todos tenemos vidas separadas y, aunque algunos han viajado conmigo en los últimos años, no estamos en contacto. Fue decepcionante cuando Rick rompió el acuerdo y comenzó a interpretar mis canciones. Si Supertramp estuviera tocando solo las canciones de Rick, sería más auténtico.

Decepcionado entonces...

Perdí el nombre de Supertramp por ser joven y no saber de negocios. Rick y yo llegamos al acuerdo de que él se quedaría con el nombre pero no podía cantar mis canciones. Hace cinco años, rompió ese pacto. La primera vez que eso sucedió me apené mucho. Me costó aceptarlo, pero ahora ya no me quita el sueño. En realidad, la verdad es que no pensé que Davies fuera a seguir con el nombre de Supertramp. Recibo muchos mails de seguidores descontentos tras ir a un concierto del otro 50% del grupo, pero yo no puedo hacer nada ahora mismo más que decir lo que pasó.

¿Siente nostalgia por los años de Supertramp?

Para nada. Fue una gran experiencia durante 14 años. Vertí mi corazón y alma en la banda y logramos un megaéxito. Sin embargo, me desilusioné de la industria de la música, tenía dos niños pequeños y quería salir de Los Ángeles, así que me trasladé al norte de California para recuperar mi brújula espiritual y estar con mis hijos mientras crecían.

Para que nos enteremos, ¿Roger Hodgson es Supertramp (lo digo porque firmó sus grandes éxitos)?

Para mí es maravilloso haber escrito una colección de canciones que han resistido la prueba del tiempo tan bien. Son como viejos amigos, pedazos de mi corazón y mi experiencia vital convertidos en canciones.

¿Se ha preguntado cómo hubiera sido su vida si Richard Palmer hubiera continuado en Supertramp?

Realmente hay muchas encrucijadas en la vida. Cuando conocí a Rick, yo ya estaba bajo contrato con una discográfica y había hecho un single con la banda de Elton John. Estaba rozando el éxito en Europa y si hubiera sido finalmente así tal vez no hubiera existido Supertramp.

¿Por qué la música de los años 70 y 80 del siglo pasado sigue teniendo éxito? ¿No hemos sabido hacer mejor música desde entonces?

La tecnología con la que contamos nunca ha sido mayor y no hay escasez de cosas sobre las que escribir. Hay buena música hoy, pero has de buscarla para descubrirla. La buena música siempre trasciende y es la que hace sentir a la gente un poco más feliz y da alguna respuesta o incluso genera nuevas preguntas

¿Dónde cree que reside la vigencia de sus temas?

Creo que en que vienen de un lugar muy profundo: de mi dolor, mis sueños, mi alegría, vienen de un lugar inspirado y honesto. Jamás pensé que fueran a perdurar tanto tiempo. Y no me canso nunca de cantarlas

¿Y la sociedad actual es mejor que la que conoció en los años 60?

Vivimos tiempos de grandes cambios, que creo que se aceleraron en los 60. Como almas podemos crecer más rápido debido a la intensidad de los tiempos. Creo que todo el dolor y el sufrimiento es para enseñarnos amor y compasión. En definitiva, la transformación del corazón es lo que va a cambiar este mundo para mejor. Todos tratamos de buscar la felicidad, descubrir quiénes somos realmente, buscar nuestra esencia. La música es un reflejo de su tiempo, pero sólo las buenas canciones con profundidad y verdad perduran.

¿Cuál es su relación con el éxito? ¿No se ha creído nunca el papel de estrella de rock?

Lo más gratificante es haber escrito canciones que llegan a la gente. La música ha sido donde he expresado mis sueños más profundos, anhelos de amor y de conocer a Dios. No creo ser diferente a otras personas. Sé que tengo un regalo para expresarme con la música y estoy muy agradecido.

De hecho, usted abandonó la música durante 20 años.

Después de estar 14 con Supertramp y alcanzar un enorme éxito, me sentí desilusionado con lo que pasaba con la banda y la industria musical. Necesitaba parar. Quería cambiar de vida: tuve dos hijos y mi propia familia... Tiempo después, precisamente tocando de una manera dispersa por España, sentí una conexión especial con la gente y me di cuenta de que era el momento de volver.

¿Cuál es la diferencia entre los conciertos actuales y los de los años dorados de Supertramp? ¿Es más feliz en estos momentos?

Estoy orgulloso de lo que fui capaz de lograr a través de Supertramp y la calidad de la producción que creamos, pero en los conciertos de ahora hay un corazón mucho más fuerte a la hora de conectar con el público.

En realidad, parece que el tiempo no pasa por usted.

Aún llego a las notas más altas. La gente me dice que incluso canto mejor. En el pasado era tímido e introvertido y la conexión que tengo ahora con la gente es mucho mayor. Me siento más conectado conmigo mismo y mis sentimientos, con la banda y con el público. Estoy pasando por un buen momento.

Sigue componiendo entre concierto y concierto, ¿verdad?

Debo de tener entre 60 ó 70 canciones compuestas pero que aún no he grabado. Son canciones que surgen de mi amor a la vida, a Dios, a la paz, lo que sucede en el mundo o los retos del hombre.

La última pregunta: ¿por qué sigue en el escenario casi 50 años después? ¿Qué le motiva después de tanto tiempo sobre las tablas?

El día que me canse de cantar mis canciones dejaré de hacer giras. ¿Se imagina lo bien que se siente uno al cantar Dreamer, Breakfast in America, It´s Raining Again, Take the Long Way Home y muchas más. La verdad es que me siento un gran privilegiado.