­El novillero peruano Joaquín Galdós se encuentra ya en Lima para afrontar su compromiso en la Plaza de toros de Acho. El diestro, formado en la Escuela Taurina de la Diputación de Málaga y residente en Fuengirola, viajaba el pasado martes a su país para reencontrarse con sus orígenes y afrontar el reto de ser el primer novillero de la historia que se enfrente en solitario a seis reses en el bicentenario coso de la capital.

De Málaga a los Andes para consolidar un sueño. Antes de partir, Galdós hizo entrega a Rafael Roncagliolo Orbegoso, embajador de Perú en España, del primer cartel impreso de su encerrona del próximo 28 de noviembre, en la que estoqueará seis reses de la ganadería de Santa Rosa de Lima. Este hierro es propiedad de su padre, el matador de toros Alfredo Galdós. En su dedicatoria, el novillero estampó: «Siento la llamada de mi tierra».

Tras haber participado en 34 novilladas en la temporada 2015 entre España y Francia, el embajador reconocía la progresión y los logros de Galdós durante todo este año. Del mismo modo se interesaba por todos aquellos aspectos históricos y antropológicos que han contribuido al desarrollo y consolidación de la tauromaquia en Perú y del momento actual de la Fiesta en América.

El festejo extraordinario alcanza una mayor relevancia al enmarcarse en los prolegómenos de la celebración del 250 Aniversario de la inauguración de la Plaza de toros de Acho; en una temporada en la que por primera vez estarán anunciados dos toreros peruanos que triunfan en España, el propio Galdós y Andrés Roca Rey.

El país andino está viviendo un relanzamiento de su tradición taurina con la irrupción de estos jóvenes espadas, lo que ha provocado una serie de ataques antitaurinos que han llevado incluso a perpetrar un atentado ante el histórico coso de Acho, el más antiguo del continente americano, con un conato de incendio. Joaquín Galdós es uno de los toreros que son apoderados por la Fusión Internacional por la Tauromaquia, de la que forma parte el empresario José Cutiño, actual gestor de la plaza de toros de La Malagueta. Precisamente este coso suena como uno de los posibles para su alternativa en Semana Santa.