­Uno de los edificios emblemáticos pero en el olvido de nuestro Centro Histórico, La Equitativa, se disfrazó ayer de inmueble neoyorquino para la recta final del rodaje de Maniac Tales, la película de historias cortas de terror producida por el malagueño Kike Mesa. Precisamente allí transcurre el episodio troncal del filme, en el que trabajarán por primera vez juntos los hijos del recordado Sancho Gracia, Rodrigo -director- y Rodolfo Sancho -actor, que se incorporará a la grabación el día 12-. El popular intérprete Enrique Arce protagoniza la historia.

Maniac Tales es una versión malagueña al cien por cien de las películas episódicas tipo V/H/S: largometrajes de terror divididos en cortos unidos conceptualmente. Hasta la fecha se ha finiquitado el rodaje de los segmentos Cimbelín, dirigido por el propio Mesa; La visita, a cargo de Abdelatif Hwidar; The skull of desire, de Denise Castro, y El momento perfecto, realizado por Enrique García.

Un inmigrante sin papeles llega para trabajar como conserje en un edificio de apartamentos de Nueva York, en unos momentos en los que ha desaparecido la guionista de una exitosa serie de televisión en EEUU, Maniac Tales, y comprueba que hay una curiosa correlación entre los capítulos de esa serie -los segmentos del filme- y las cosas que ocurren en ese edificio. Ése es el punto de partida -lo que se está rodando en La Equitativa- de un ambicioso proyecto con un presupuesto de 300.000 euros -logrado, dice Mesa, «al estilo clásico»: hipotecando su casa y pidiendo préstamos a los bancos-. Se espera que el filme esté terminado para la próxima edición del Festival de Málaga.