Hoy se cumplen 25 años del fallecimiento en Madrid de la pensadora veleña María Zambrano. El Ayuntamiento de Vélez Málaga sirvió ayer de punto de encuentro en la apertura de un ciclo de actividades conmemorativas para rendir homenaje a la filósofa. Entre los muchos mensajes que se pudieron escuchar a lo largo de la jornada, destacó el del delegado del Gobierno andaluz en Málaga, José Luis Ruiz Espejo: «El mejor recuerdo y homenaje que se le puede hacer es difundir su obra y los valores de su legado».

En este sentido, el dirigente provincial remarcó: «Es importante que sigamos difundiendo su obra y contribuyendo a transmitir sus ideas de progreso, de convivencia y justicia social». Estos actos conmemorativos del aniversario de la muerte de María Zambrano comenzaron minutos antes de las doce del mediodía, al dirigirse una comitiva institucional encabezada por el propio Ruiz Espejo hasta el cementerio municipal de la capital axárquica. Allí, en la tumba de la escritora, una ofrenda floral dio paso a la colocación de una placa en recuerdo a su hermana, Araceli Zambrano.

El alcalde veleño, Antonio Moreno Ferrer (PSOE), destacó que es un «honor conmemorar este aniversario, el de una mujer que ha llevado el nombre de la ciudad a todos los países del mundo occidental y que gracias a ella Vélez Málaga es conocida por grandes intelectuales», remarcó. Ruiz Espejo subrayó asimismo la importante labor que desarrolla el Ayuntamiento mediante la gestión de la Fundación María Zambrano. Y ofreció al mismo tiempo la colaboración de la propia administración autonómica para fomentar el conocimiento de los actos conmemorativos iniciados ayer.

Además de esta efeméride, los responsables de la Fundación aspiran asimismo a «organizar un ambicioso ciclo de actividades», debido a que se cumplirá el trigésimo aniversario del organismo que trabaja por la difusión de la amplia obra de la que está considerada como una de las grandes pensadoras universales del siglo XX. El Consistorio, por su parte, también pretende recuperará la celebración de los congresos internacionales que versarán sobre su bibliografía y su trayectoria vital, así como la reedición de la revista Antígona, que se lanzará en versión digital.

María Zambrano nació en Vélez Málaga el 22 de abril de 1904. Su trayectoria como ensayista y filósofa también proporcionó, además de numerosas obras filosóficas, un importante legado como poeta. Así logró obtener reconocimientos como como el Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades, en el año 1981, o el Premio Cervantes en el año 1988.

Precisamente fue presentado ayer, justo con motivo de la reseñada efeméride, el segundo volumen de las Obras Completas de María Zambrano. Al acto, junto al delegado del Gobierno andaluz y el regidor veleño, asistieron tanto el concejal delegado de Cultura en el Consistorio, José Alarcón, como el director gerente de la Fundación María Zambrano, Antonio Garrido Moraga. En este nuevo tomo se incluyen los cinco libros de la segunda etapa de Zambrano, correspondientes a su exilio en Cuba y Puerto Rico.

«Su obra está traducida a todos los idiomas de Occidente e incluso a países tan alejados como Japón, ya que ha supuesto un cambio radical y un método nuevo en la reflexión filosófica. Además, hablamos de una persona que amaba profundamente a su tierra, a Vélez Málaga», argumentó el alcalde, Antonio Moreno Ferrer.

Alarcón agregó el sentido último del homenaje celebrado ayer: «María Zambrano decía que la pasión central de la vida es el amor, y hoy precisamente nos encontramos ante un acto de amor y también de reconocimiento, hacia su persona», matizó. El director de la Fundación, Antonio Garrido Moraga, comentó por su parte que el pensamiento de la filósofa axárquica «tiene vigencia hoy en día, ya que si miramos a nuestro alrededor nos encontramos con el egoísmo europeo o la esclavitud de muchas personas; todo aquello contra lo que luchó María».

Los libros recogidos en el volumen II son Nostalgia y esperanza de un mundo mejor (1940), La confesión: género literario y método (1943), El pensamiento vivo de Séneca (1944), La agonía de Europa (1945) y Hacia un saber sobre el alma (1950), que giran en torno a la búsqueda de la razón poética hacia un nuevo horizonte del pensamiento. Estas obras conducen la filosofía hacia su unión tanto con la poesía como con la religión, las cuales vertebran la obra de Zambrano, donde además confluyen el sentimiento trágico y místico ante la vida.

Las Obras Completas de María Zambrano comprenden ocho volúmenes elaborados por parte de la Fundación que lleva su nombre, de los que ya se ha presentado la mitad de esta recopilación. En diciembre de 2011 se presentó en el Centro del Exilio de Vélez-Málaga el volumen número III, con libros como Persona y democracia, La España de Galdós o La tumba de Antígona. En marzo de 2014 se presentó, en la Casa del Lector de Madrid, el volumen VI; y el volumen I fue presentado en abril del pasado año, en la Biblioteca Nacional de Madrid.