Desde primera hora de la mañana, una tremenda grúa ha interrumpido el normal discurrir de la calle Alcazabilla. Apostados en una de las paredes del Cine Albéniz, un buen puñado de cajas. Se trataba, sin duda, de una mudanza, pero no de una mudanza cualquiera: en uno de los embalajes se podía leer "Sr. Antonio Banderas". Sí, el intérprete malagueño, que acaba de comprarse una residencia en Surrey (Inglaterra) está preparando paralelamente su desembarco en el ático que adquirió hace unos años en la céntrica calle malagueña.

El actor y cineasta ya ha terminado de reformar la vivienda -con espectaculares vistas a la Alcazaba, la Aduana, el Museo Picasso, el Teatro Romano y la torre de la Catedral: si hay una manzana de oro en el Centro Histórico...- a su gusto -incluyendo la instalación de un ascensor independiente al de la comunidad- y ya ha empezado a instalarse. Por cierto, entre las pertenencias embaladas destacaba sobremanera una súper pantalla de 85 pulgadas cuyo precio ronda los 30.000 euros.