­Si sobre el escenario se reúnen Juanma Lara, Salva Reina, Álvaro Carrero y María José Parra, tengan por seguro que las risas serán abundantes en el patio de butacas. Y si, además, Ignacio Nacho colabora en la dirección, las situaciones absurdas y el humor más transgresor serán una constante. Estos son los elementos de Se ha escribido un crimen, montaje de Teatroz y Producciones Monas que hoy regresa al Teatro Alameda (20.30 horas), donde permanecerá hasta el 10 de abril.

El montaje se estrenó en octubre de 2009 y desde entonces no ha parado ser reclamado por el público. «Se trata de una obra sin prejuicios a la hora de hacer humor. Hay momentos tanto de Groucho Marx como de Pedro Reyes. A veces es incluso intelectualmente incorrecta», destaca Juanma Lara, que además de director también participa como actor. Pero la función original ya no es la misma desde entonces, ya que, según confiesa Salva Reina, «se le ha dado una vuelta de tuerca» para este regreso a Málaga. El responsable de los cambios, que afectan incluso al final de la obra, es Ignacio Nacho, que «ha aportado un nueva mirada y un nuevo punto de surrealismo», destaca el actor de Allí Abajo.

Reina sostiene que la obra es una comedia en la que se le dan la vuelta a «los tópicos policiales que vemos en las series y en las películas de investigación policial». «Todos estamos muy familiarizados con los métodos de los interrogatorios, la recogida de pruebas en el lugar de los hechos, las persecuciones, las autopsias y el luminol. Y todo eso aparece en escena», recuerda.

«La Policía sale muy mal parada en esta obra, aunque no es nuestra intención criticar su trabajo», matiza Lara, quien, precisamente encarna a dos policías, aunque de muy distinto corte, en las series El Príncipe y Amar es para siempre.

Tras recorrer escenarios de Granada, Sevilla, Córdoba y Barcelona, entre otras muchas ciudades, Se ha escribido un crimen regresa a su ciudad. El público así lo ha querido y el público es el que manda.