Héroe de Sostoa es una calle bastante larga. Está situada en Carretera de Cádiz y miles de personas circulan por sus aceras todos los días. Es un barrio más. Con las típicas tiendas de ultramarinos, pequeños comercios y algún que otro bar. En el número 65, entre una frutería y una pastelería, se encuentra The Hall, una sala de conciertos que colma su escenario de espectáculos y música, de cultura en definitiva. Llevan ya dos años, y subiendo.

A la entrada lo primero que se ve es una sala pequeña, provista de un piano para conciertos exclusivamente de jazz. El otro espacio, más amplio, dedicado para espectáculos de teatro y conciertos que, en principio, atraigan un mayor público. En el mes de abril soplaron sus dos primeras velas y Jesús Vez, dueño de la sala, sigue tan ilusionado con The Hall como el primer día. «Hay que estar loco para meterse en este tipo de empresa, pero me encanta la cultura», comenta Jesús. Pero, ¿por qué decide Jesús montar todo este embrollo aquí? Muy claro: «Este local es mío y Carretera de Cádiz es un sitio donde hay una afluencia de público brutal».

Este punto a favor junto a la casi inexistencia de lugares como The Hall en esta zona ha permitido que tanto el público de este barrio malagueño como grupos locales quieran entrar a The Hall tanto para escuchar como para ser escuchados: «Nosotros le damos cabida a todo». No hace falta ser conocido mundialmente para tener un hueco en la sala. «Si el grupo que viene es de barrio y no tiene una proyección más allá de la provincia, tenemos más dificultades para atraer a un público que no sea el propio de la banda», reflexiona. ¿Qué hacer? Abaratar la entrada. Y parece que funciona. Pero a Jesús Vez no le interesa el dinero. Desde el principio de esta aventura ha querido transmitir su pasión por el espectáculo y la música a quienes quisieran. A él no lo subvenciona nadie: «Yo vivo de mi bolsillo», comenta Jesús. «Yo quería tener mi propio barecito, para tocar con mis amigos», asegura este autodefinido «músico amateur».

Desde la apertura de la sala, artistas internacionales y locales han pisado The Hall y siempre quieren volver. Jesús dice que una vez que entras eres de la familia. «El primer año tuvimos una afluencia de público bastante buena y eso ayudó a que se diese a conocer la sala». «Vamos a comprar un nuevo equipo para dar el golpe definitivo a The Hall», comenta Jesús. No solo grupos locales conocen la sala; bandas hasta de Rusia y Ucrania han pasado por los dos escenarios del local. Y todas quieren regresar a este rincón de la Carretera de Cádiz.

@mariavvalverde