­Yuri Chugúyev no para. Toca en la Orquesta Filrmónica de Málaga, regenta tres restaurantes en la capital y ha colaborado con muchísimas orquestas de todo el mundo. ¿Lo último? La Orquesta Filarmónica de la Radio y la Televisión Eslovaca ha tocado una parte de una de las obras más ambiciosas de Chugúyev, Picasso. Cuadros Sinfónicos, ante el papa Francisco en Armenia hace unas semanas.

De nacionalidad rusa, lleva en Málaga toda la vida, firmó su primer contrato en Moscú con la Orquesta Filarmónica de Málaga (OFM) en 1991. Desde muy pequeño, la música ya corría por las venas del malagueño. A los diez, empezó a introducirse en el mundo de la percusión. Empezó con la OFM en los noventa, pero ha continuado hacien proyectos en solitario y participando con otras orquestas. «Mi cabeza no para, siempre estoy pensando qué hacer. Aquí en Málaga no suelen llegarme ofertas para hacer, por eso trabajo tanto fuera de España», dice. Uno de sus últimos éxitos cosechados fue el permiso concedido por el Ministerio de Cultura armenio para que la Orquesta Filarmónica de la Radio y Televisión Eslovaca tocase una de sus piezas en la visita del Papa Francisco en Armenia hace unas semanas. «Al papa Francisco le gustó mucho mi obra Picasso. Cuadros Sinfónicos, y quiso que se interpretara en su visita. Como es muy larga [consta de 16 partes] sólo se interpretó Las Palomas», comenta el compositor.

Picasso. Cuadros sinfónicos es una propuesta cultural que se grabó en 2014. En esta obra, las artes plásticas y la música se mezclan para transportar al oyente desde la ciudad de Málaga, pasando por París y las Ramblas de Barcelona, ciudades donde Pablo Picasso pasó parte de su vida y se inspiró en crear sus cuadros. «Esta obra es un viaje musical a través del cual conoceremos las obras del pintor malagueño de una forma nunca antes vista ni oída», puntualiza Chugúyev.

Conciertos educativos. Con este proyecto, Yuri Chugúyev tiene pensado hacer varios conciertos educativos por todo el mundo, recitales donde la participacíon de los niños será absolutamente imprescindible: además de cantar en el concierto con un coro, podrán concursar dibujando obras de Picasso que serán expuestas mientras se da el concierto: «De esta forma quiero incentivar a que la gente escuche música clásica. No lo hago por mí, sino por ellos, para que decubran esta maravilla». Loable objetivo.