El clan de las divorciadas se estrenó en el Alameda con caras conocidas como las de Andoni Ferreño, y las televisivas Esperanza Elipe y Vanesa Romero. La pieza cómica ha permanecido en la cartelera francesa ininterrumpidamente más de diez años, y ahora gira por España con este elenco. En sí, la obra, a pesar del enorme éxito en el país galo, no deja de ser una comedia bastante cándida. Es la historia de tres mujeres divorciadas que comparten piso. En principio se trata de tres caracteres diferentes: la bruta de pueblo, la aristócrata venida a menos, y la simplona y típica ´rubia´. Lo que las une, además del piso, es conllevar una supuesta y traumática situación: el síndrome post-divorcio y la búsqueda de nuevo marido.
Abundan los tópicos y las clasificaciones imperecederas que tanto juego dan y que llegan a provocar tanta risa. Un hombre vestido de mujer -Andoni Ferreño hace el papel de la pueblerina-, (como viene ocurriendo desde el primer día en que se puso en escena, este personaje lo interpreta un hombre, suponemos que porque sólo un hombre puede darle ese carácter de oso a un papel femenino); las divorciadas son una categoría de mujer desdeñada que no perdona, pero que desespera por recuperar su estado civil de casada como meta; las mujeres sólo se hallan a sí mismas en la camaradería entre iguales. Eso sí, podemos decir que los tres intérpretes aprovechan sus cualidades humorísticas para sacar el mayor partido de los personajes y la relación con el espectador. Quien quiera ver a Andoni Ferreño increíblemente feo, que venga y lo compruebe, además de su facilidad para comunicar y la vis cómica de que hace gala en el espectáculo. Igualmente atractivas son las labores de creación de Esperanza Elipe y Vanesa Romero, que lo clavan en sus tipologías. Hay muchos momentos divertidos en los que el espectador, cómplice de la situación, se desternilla y aplaude. Eso desde luego es un logro de la dirección, que ha creado un espectáculo coherente en la puesta en escena, con una factura de corte tradicional dentro de las comedias de su género. Eso sí, no estaría de más darle un repaso a la escenografía, que se ve un tanto deteriorada y no queda bonita una presentación así; probablemente efecto de tanta carga y descarga en gira.
