­Una vez existió un mundo sin los cómics de Marvel. La mayor fábrica de superhéroes del planeta -anteriormente Timely Cómics, dedicada a publicar historietas del Oeste y relatos románticos- protagonizó al inicio de los años sesenta un giro radical con la aparición de Los Cuatro Fantásticos, un súper equipo compuesto por personajes cercanos, que no ocultaban en secreto su identidad y no vestían estrafalarios trajes. La fórmula ideada por Stan Lee, que por entonces ya contaba con más de veinte años en el mundillo de las viñetas, proporcionó a Marvel la escalera del éxito. Y aunque el grupo formado por Mr. Fantástico, la Antorcha Humana, la Chica Invisible y la Cosa fue una respuesta a la Liga de la Justicia, de DC Cómics, su repercusión supuso un punto de inflexión en la historia de la compañía.

Lee, confiado en que su nuevo enfoque de superhéroes acabaría siendo la clave del futuro, sacó su mejor mano con Spiderman, quien desde agosto de 1962 se convertiría en el santo y seña de Marvel. Poco antes había creado al Increíble Hulk, pero no fue Bruce Banner sino Peter Parker quien conquistó de forma masiva el corazón de los adolescentes. Después llegarían Thor, Iron Man, Los Vengadores, La Patrulla X, el triunfal regreso del Capitán América y Daredevil, con lo que Marvel se convertiría en la gran empresa de cómics jamás imaginada.

Con el fin de trasladar al lector de hoy las sensaciones que causaron los nuevos y sorprendentes personajes de la Casa de las Ideas, los que protagonizaron la Edad de Plata del cómic norteamericano de aquellos maravillosos años, la editorial Panini Cómics ha rescatado las primeras aventuras de los clásicos superhéroes a través de su línea Marvel Gold (OmniGold), gracias a la que podemos ser testigos del origen de estos personajes que hoy son parte esencial de la cultura popular. Editados con exquisito gusto, a todo color y en tapa dura, los volúmenes de Panini son un verdadero tesoro para los amantes de las viñetas.

El asombroso Spiderman. Poder y responsabilidad

¡No puedes llamar Spiderman a un superhéroe! ¡La gente odia a las arañas¡ El propietario de Marvel Cómics Group, Martin Goodman, no podía estar más equivocado. Desde que el hombre araña apareciese por primera vez en agosto de 1962 en las páginas de Amazing Fantasy #15, se convirtió en el personaje más popular de la editorial. El trepamuros nacido de la cabeza de Stan Lee y las manos del dibujante Steve Ditko conquistó el corazón de una juventud que de inmediato se vio reconocida en Peter Parker, un escuálido empollón que vive con sus tíos y que se encuentra, tras un accidente en un laboratorio, con unos poderes arácnidos con los que no sabe qué hacer. Poder y responsabilidad es el título de este OmniGold que compila los dos primeros años de historias protagonizadas por Spidey, hasta diciembre de 1964. A lo largo de las 600 páginas de este volumen los lectores son testigos de cómo Parker va sorteando -con gran sentido del humor, otras de sus grandes características- todos los conflictos con los que se encuentras tras adquirir sus superpoderes y presenciar la muerte de su tío Ben. También atestigua el origen sus grandes villanos, como Camaleón -el primero al que debe enfrentarse-, Buitre, el Doctor Octopus, Electro, el Hombre de Arena o el Duende Verde. Spiderman vino a cerrar la santísima trinidad del mundo del cómic, que completan Superman y Batman, gracias una visión y un concepto distinto, más cercano a las inquietudes de los lectores de su generación, a lo que hasta el momento representaban los grandes superhéroes. La popularidad de Spiderman no ha parado de crecer desde entonces, protagonizando series y películas de todo tipo. Aunque no hay nada como conocer, tal y como muestra este volumen, cómo fueron sus primeras aventuras en papel.

Los Vengadores. La llegada de Los Vengadores

Exultantes por las buenas ventas de Los Cuatro Fantásticos y Spiderman, los responsables de Marvel se sentían con el suficiente optimismo como para reunir a los nuevos superhéroes de la compañía y consolidar su creciente éxito. Stan Lee y el dibujante Jack Kirby -ambos son los verdaderos responsables de la llamada Era Marvel- dieron con la clave en septiembre de 1963 al hermanar a tipos tan diferentes como Iron Man, Hulk, Thor, El Hombre Hormiga y La Avispa para defender el planeta. En el cuarto número de Los Vengadores (marzo de 1964) se sumó el Capitán América. Desde ese momento, el mundo del cómic ya no volvería a ser el mismo. La llegada de Los Vengadores compila los primeros 22 números del equipo de los héroes más poderosos de la Tierra, capaces de salvarnos de las temibles intenciones de Kang -el mortal descendiente del Dr. Muerte-, o los Señores del Mal, grupo de villanos encabezado por el Barón Zemo.

La Patrulla X original

Stan Lee no se conformaba con la reunión de los grandes héroes de Marvel en Los Vengadores. Su efervescente creatividad le llevó a idear otro grupo personajes radicalmente distinto a todo lo anteriormente visto. Un equipo compuesto por hombres -no extraterrestres o seres extraños- con un don de nacimiento y no provocado, como era costumbre, por algún accidente químico o radioactivo. Los mutantes -ese fue el primer nombre que se barajó para este nuevo proyecto- de Marvel eran además marginados por el resto de los humanos, que lejos de mirarles como héroes y salvadores, les consideraban seres sospechosos. Lee volvió a contar con Kirby para dar forma a los X-Men, un grupo de talentos tutelados por el Profesor Xavier. Las páginas de La Patrulla X original, presentan la llegada al mundo del equipo encabezado en primera instancia por Cíclope, la Chica Maravillosa, el Hombre de Hielo y la Bestia. Por si no tuvieran poco con el rechazo que provocan en los humanos, los X-Men también se enfrentan entre ellos mismos. La lucha entre los discípulos de Xavier y Magneto, que prefiere imponer la supremacía de los mutantes al resto de la humanidad, es otra de las líneas argumentales que hizo de La Patrulla X uno de los cómics más complejos y atractivos del universo Marvel.

Capitán América. La leyenda viviente

Durante la Segunda Guerra Mundial, el sentimiento patriota de los Estados Unidos se vio reforzado con llegada del Capitán América, que en su primera historieta le propina una paliza al villano por excelencia: el mismísimo Adolf Hitler. Esta aventura, que llegó a los quioscos en diciembre de 1940, significó el mayor éxito de Timely Cómics -empresa que más tarde se convertiría en Marvel- hasta la fecha. Pero acabada la contienda, el mundo de los superhéroes comenzó a experimentar un profundo declive, lo que terminó por hacer desaparecer del mapa las publicaciones del Centinela de la Libertad en 1950. Una década más tarde, Stan Lee quiso rescatar del olvido a los grandes héroes de la antigua Timely Cómics: la Antorcha Humana, Namor (el Príncipe Submarino) y el Capitán América. Empezó por el primero, al que incluiría con gran acierto y características renovadas en Los 4 Fantásticos. La recuperación del Capitán América llegaría de la mano, precisamente, de la Antorcha Humana en la serie Strangle Tales #114 de 1963, aunque éstas viñetas sólo fueron una especie de test para conocer la aceptación del público. El verdadero renacimiento del Centinela de la Libertad se produciría junto al nuevo gran equipo de héroes de Marvel: Los Vengadores. Este volumen recopila las historias del retorno -esta vez para siempre- del soldado Steve Rogers en los años 60 tras más de dos décadas de hibernación.