Gustan mucho los aniversarios culturales para marcar la relevancia y destacar la vigencia de obras y autores más o menos importantes. A veces, en cambio, se trata de una cuestión de justicia. Como ocurre en el caso de Juan Antonio Argüelles Rius, Arguru: este 2017 se cumplen 10 años de la trágica muerte del productor musical y creador de software malagueño, uno de los grandes pioneros de la electrónica en nuestra provincia y el genio de la tecnología que sentó las bases para que muchos talentos hayan podido innovar desde sus habitaciones. Y no hablamos de mindundis, precisamente: Deadmau5, uno de los nombres sacrosantos de la EDM, tituló uno de sus temas más queridos Arguru, en reconocimiento a los grandes pasos adelante dados por el malagueño.
El 3 de junio de 2007 Argüelles falleció en un desdichado accidente de tráfico cerca de Benalmádena. Terminaba entonces una carrera de alquimista digital, de labor callada pero fundamental. Y es que este hombre creó los sintetizadores más perfeccionados de su época -los usuarios de Discovery y Vertigo saben a lo que nos referimos-, el influyente sampler Directwave y el software para DJs Deckadance, poniendo las primeras piedras de Renoise, la estación musical preferida por muchos productores y pinchas de todo el planeta.
Música
Cuentan quienes conocieron a Juan Antonio Argüelles que lo suyo venía de lejos. Ya cuando tenía unos 15 ó 16 años hacía cosas realmente increíbles con el Amiga 600 del que disponía entonces: a esa edad ya creaba juegos con gráficos y música propia de un nivel estratosférico. Desde entonces siguió evolucionando, siempre de manera autodidacta, hasta llegar a ser contratado nada más y nada menos que por Image Line, una de las empresas clave en el desarrollo de software musical.
«No lo conocí [a Arguru] más que de intercambiar algunos comentarios en foros como el de Hispasonic, pero era un tipo realmente peculiar, el típico genio medio loco que ve las cosas desde donde otros no llegamos. Además, era el único desarrollador de plugins VST español con fama realmente internacional», escribió Jorge Ruiz, uno de los admiradores del malagueño en uno de los foros online que informaron de la muerte de Arguru.
Diez años después, la comunidad de música electrónica sigue recordando a uno de sus magos.
