'El aroma del mal' es la primera novela del autor malagueño Frank Smyliany. Tres años de trabajo, este joven autor ha creado una historia negra con pinceladas de humor, suspense y romanticismo. La historia comienza con la aparición de un cadáver en el Arroyo de la Miel y gira entorno a la búsqueda del asesino. Para ello, una médico forense malagueña, un detective de homicidios de Los Ángeles y «un tipo peculiar» del Arroyo de la Miel, trabajan conjuntamente, siendo inevitable que caigan en los juegos del psicópata al que persiguen.

La presentación de 'El aroma del mal', novela editada por Círculo Rojo, tendrá lugar el próximo jueves 23 de febrero en la librería Proteo Prometeo (19.00 horas) y el autor estará acompañado por la periodista Laura Pérez Torres. La historia de este libro se concibe, según el autor, como un homenaje a Málaga, ya que la mayoría de los lugares que aparecen son reales, como la Alcazaba, la Farola o distintas calles de Torremolinos, Churriana y Arroyo de la Miel. Además, la gastronomía o las costumbres locales también tienen cabida en la novela, en la que aparece «incluso una gitana vendiendo biznagas», relata el propio escritor, que desde pequeño ya escribía relatos cortos y poemas. Su poema titulado Sobre el aire obtuvo el primer accésit del Premio de Poesía Universidad de Málaga en el año 2000.

Smyliany ambienta la trama de este libro en el verano malagueño de 2013, con la intención de que se conozca la ciudad y su paisaje. Asehgura que el trabajo de documentación lo ha realizado a través de internet, sin embargo, señala que ha contado la ayuda de un inspector de Policía Nacional, un médico forense y de una cirujana cardiovascular del Hospital Ramón y Cajal, que han corregido y dado precisión a la narración.

A pesar de ser una novela negra, Smyliany se considera un gran defensor del romanticismo. «Hay normas que dicen que no debe haber romance en ese género, pero, como en la vida, hay de todo», sostiene. Por ello, el suspense y la intriga se mezclan con el romance. «Hay pasajes en los que parece que estás leyendo una novela de terror y otros en los que parece que lees una romántica», añade. Además, el humor también supone una parte fundamental de la novela. De hecho, el autor asegura que escribió un capítulo y después se «estancó». Pero confiesa que al idear un personaje cargado de humor le volvió la inspiración.

El malagueño tiene como referentes a escritores como Asa Larsson o Thomas Harris y se inspira en algunas películas de corte policiaco, entre ellas Seven. «Desde pequeño he sentido la necesidad de contar historias», afirma. Ambiciones no le faltan a este joven autor, que aunque sabe que el mercado editorial es muy competitivo, no reniega a su sueño de convertirse un día en un escritor de bestsellers. «Mi sueño es llegar muy alto con este libro y que lo lean millones de personas en el mundo. Aunque vaya con humildad, con los pies sobre la tierra, mi mirada se eleva hasta los cielos».