La escalinata del Centre Pompidou es el espacio en el que el artista malagueño José Luis Puche ha jugado con la teoría del «no lugar», enunciada por el antropólogo francés Marc Augé, en la intervención «Papá», que se inauguró ayer como parte del programa de actividades de la quinta edición del Málaga de Festival (MaF), el ciclo de actividades previas al Festival de Cine en Español. «Cuando di rienda suelta a mi proyecto, partí de la base de dónde estaba, en un lugar que realmente no es un espacio expositivo, por lo que tenía que salir de mi zona de confort, que es el dibujo bidimensional», explica Puche.