«Para mí, el momento más memorable de nuestra carrera musical es I want you back. Porque con esa canción plantamos nuestra bandera. Cuando el público la escuchaba se volvía loco. Es la canción que nos dio a conocer en todo el mundo y nos acompañará durante el resto de nuestras vidas». Con estas palabras resume Jackie, el mayor de los hermanos Jackson, el impacto del grupo que a finales de los años sesenta fundó, bajo la estricta supervisión de su padre, junto a sus hermanos Tito, Jermaine, Marlon y Michael. Una formación que lograría desplazar en varias ocasiones a los Beatles de los primeros puestos de las listas de ventas y que provocó tanto revuelo como el que hicieron John, Paul, George y Ringo con sus canciones.

Los Jackson crecieron en una pequeña casa de dos habitaciones ubicada en el número 2300 de la calle Jackson en Gary, Indiana. Allí, Joseph y Katherine formaron una gran familia de nueve miembros. El matrimonio ocupaba una de las estancias de la casa, mientras que los seis chicos -a los cinco de la banda hay que sumar al pequeño Randy, que se incorporaría a The Jackson tras la marcha de Jermaine- compartían la otra en camas litera de tres pisos. Por su parte, las chicas, Rebbie, La Toya y Janet, dormían en sofás cama. En esa olla a presión surgió la magia de la música. Y aunque el siempre severo Jospeh, que había probado suerte sin éxito como boxeador y guitarrista, tenía prohibido a sus hijos que cogieran sus guitarras, la orden sirvió para todo lo contrario: como irresistible reclamo para los chicos, que pronto comenzaron a mostrar su talento con los instrumentos de papá.

«Los vecinos venían a verlos. Se amontonaban en la ventana y bailaban en el jardín», cuenta su madre Katherine en el volumen El legado de los Jackson, publicado por la editorial Blume. Un libro que recorre la meteórica carrera hacia el éxito de los Jackson Five contada por los propios protagonistas. Además de las impresiones y recuerdos de toda la familia, el volumen contiene una gran cantidad de fotografías procedentes de los archivos personales de los Jackson, muchas de las cuales ven la luz en estas páginas por primera vez.

Será el próximo 31 de enero cuando se cumpla medio siglo del lanzamiento del primer single de los Jackson Five, titulado Big Boy, canción que prendió la mecha hacia el estrellato de los cinco hijos mayores de Jospeh y Katherine. Tras ganar varios concursos de jóvenes talentos y revolucionar el Teatro Apollo de Nueva York, los Jackson Five ficharon por Motown, el sello de Berry Gordy, que les catapultó hacia lo más alto. En octubre de 1969, los hermanos Jackson alcanzaron su primer número uno en la lista Hot 100 de Billboard gracias a I want you back. En menos de un año, en abril de 1970, llegaría el single ABC, que desplazó de las listas nada menos que a Let it be de los Beatles para convertirse en el segundo número uno de los Jackson. Llegaron más éxitos (Mama's pearls, The love you save, I' ll be there, Never can say goodbye...), la fama y el dinero. Y la familia pudo mudarse a una casa de doce habitaciones en California. También comenzaban a despuntar las carreras en solitario de los hermanos Jackson. Para Michael, la voz principal del conjunto y centro de atención de todas las miradas, la popularidad comenzaba a pesarle en cierto modo. «Es eviente que el éxito acarrea soledad. La gente cree que eres afortunado, que lo tienes todo. Piensan que puedes ir a cualquier lugar y hacer cualquier cosa, pero no es así. Se echan de menos cosas más básicas».

A mediados de los setenta, y después de haber recorrido medio mundo con las giras de Motown, los Jackson deciden fichar por CBS, momento en el que Jermaine abandona la formación, que a partir de entonces pasaría a llamarse The Jacksons y que se completaría con la entrada de Randy. Con la llegada de los años ochenta, Michael comenzó a volar mucho más alto que sus hermanos. Primero con Of the wall (1979) y después con Thriller (1982). El legado de los Jackson traspasa esta etapa que marca el final del conjunto, pese a las ventas de discos como Triumph (1980) y Victory (1984), y llega hasta la actualidad, con el triste fallecimiento del hermano con más talento de todos. Un recorrido por la historia de una familia que, aunque a veces de manera estrafalaria, ha dado todo por la música.