La plaza de toros de Carratraca va a volver a acoger un espectáculo taurino tras cuatro años y medio de inactividad. La Escuela Taurina de la Diputación Provincial de Málaga, en colaboración con el ayuntamiento de la localidad, han acordado la celebración de una clase práctica en la jornada del próximo 28 de febrero, con motivo de los actos del Día de Andalucía. De este modo, se vuelve a dar utilidad taurina a un edificio que era reinaugurado en septiembre de 2013 tras las obras de remodelación que había llevado a cabo la institución provincial en dos fases en colaboración con el Ayuntamiento por un importe global de 132.867 euros.
La adaptación de la gradas con medidas de seguridad, evacuación de personas, colocación de los burladeros, la instalación de tres corrales y la construcción de pasillos en los chiqueros con salida a la plaza fueron algunas de las actuaciones emprendidas para poder adaptarse al reglamento taurino.
El día 8 de septiembre de 2013, también de la mano de la Escuela Taurina, se volvía a ofrecer un espectáculo taurino en este coso inaugurado en 1878, y que había permanecido décadas en desuso. La experiencia, que tuvo un gran respaldo de público, intentaba repetirse al año siguiente, aunque en este case se recibía la negativa de la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía en Málaga, indicando que el recinto, por su reducido ruedo de tan sólo 25 metros de diámetro el cual no puede ser objeto de ampliación o subsanación por su afección como Bien de Interés Cultural, no podía albergar espectáculos taurinos, salvo los regulados por el Reglamento de Festejos Taurinos Populares de Andalucía.
Una nueva interpretación reglamentaria por parte de la Junta de Andalucía ha dado ahora vía libre a esta clase práctica, que con un carácter gratuito se engloba en otro tipo de espectáculos como pudieran ser las capeas o sueltas de vaquillas, y además cumple con los requisitos previstos en el Reglamento de Escuelas Taurinas de Andalucía.
Estructura
Se ha tenido en cuenta también que se trate de una plaza histórica, en la que no se pueden hacer alteraciones de la estructura. Así, aunque la reglamentación señala que el diámetro mínimo del ruedo de una plaza de toros debe ser de 30 metros, en nuestra provincia hay al menos otros tres casos de cosos históricos que no los cumplen y en los que en los últimos años se han ofrecidos espectáculos, como es el caso de Mijas, Cortes de la Frontera o la plaza Ochavada de Archidona.
