Los Reyes presidieron ayer la entrega de las Medallas de Oro al Mérito en las Bellas Artes a una veintena de personalidades nacionales e internacionales que han destacado en diferentes campos de creación artística y cultural. Un acto, celebrado en el Centre Pompidou de Málaga, que tuvo a un premiado muy especial pero no anunciado: la propia Málaga, saludada como nueva capital de la cultura por los participantes en la ceremonia. «Málaga ha sabido reescribirse y es ya la capital europea de los museos», aseguró el ministro de Cultura, Íñigo Méndez de Vigo, en su discurso. Y lo apuntaló el propio don Felipe en sus palabras: «Espero no incomodar si expreso mi deseo de que continúe el vínculo del Pompidou y Málaga y que sea una bella realidad por muchos años más». Una frase que, a buen seguro, tendrá peso en la decisión de los responsables del centro madre francés sobre la prórroga de su acuerdo con nuestra ciudad.

Una de las salas centrales del Pompidou acogió la ceremonia. Allí se concentraba la impresionante nómina de premiados: el editor Manuel Borrás Arana; la artista María Rosa Calvo-Manzano; el diseñador de moda Lorenzo Caprile; el actor José Coronado; el guitarrista Tomatito; el bailarín Rafael Amargo (visiblemente emocionado); el torero Julián López El Juli (uno de los más aplaudidos); el director del Festival de Jazz de San Sebastián Miguel Martín; el diseñador industrial Miquel Milà i Sagnier; la actriz y directora Magüi Mira; el director de museo Guy Philippe Henri Lannes de Montebello; el Orfeón Pamplonés; la Fundación Duques de Soria de Ciencia y Cultura Hispánica; la directora Helena Pimenta; el cocinero Pedro Subijana; la poeta Julia Uceda y el editor y promotor cultural Leopoldo Zugaza. Ausencias destacadas: la cantante Gloria Estefan (recogió el reconocimiento en su nombre una prima) y el actor Ricardo Darín (subió al estrado el escritor Mario Reyes). Igualmente, a título póstumo se reconoció al cantante de jota José Iranzo Bielsa, conocido como Pastor de Andorra.

En su discurso, Felipe VI reivindicó el arte como instrumento para ser «más libres» y la cultura, «que debe hacernos más fuertes» como sociedad, subrayando la importancia de la labor artística como contribución a la formación de la historia común: «Hacéis de nuestra sociedad un hábitat de libertad, diversidad, de belleza compartida».

Méndez de Vigo, por su parte, resaltó la importancia de la cultura como «el alma de la nación española», agregando que «su fuerza, su innovación, su historia, su arte, su música, su cine, sus libros... conforman la identidad de España».

«En un tiempo en que algunos parecen empecinados en sembrar división, la cultura, esa cultura que en ocasiones parece estar en un segundo plano, emerge una y otra vez para fortalecernos y aglutinarnos», sostuvo, considerando que «nada hay más cohesionador que las risas de una obra de teatro, que el impacto sensorial e intelectual de la belleza de una obra arquitectónica, que la emoción compartida de una película de cine».

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, dio la enhorabuena a los galardonados y defendió que «no siempre se hace justicia con quienes proporcionan la maravilla de la felicidad, que llega en forma de música, teatro, pintura, tauromaquia, gastronomía...». Además, resaltó que tres de los premiados sean andaluces, «exponentes sobresalientes» de una comunidad «abierta, rica en creatividad, en ingenio y talento».

Coronado, en nombre de todos los galardonados, dedicó unas breves palabras a los allí presentes para ensalzar el valor y la importancia de la cultura y de sus trabajadores. Pero, sobre todo, llamó la atención por dos guiños: uno, al rey emérito, Don Juan Carlos, ya que comenzó su discurso con la frase «Me llena de orgullo y satisfacción», provocando las risas del respetable; y segundo, compartiendo su impresión de que este año el ministro de Cultura le daría una alegría a la gente del cine (en referencia a la bajada del IVA cultural). «Se lo he repetido 21 veces», dijo entre risas.

Sí solicitó que entre todos hagan que la cultura y las bellas artes no sean un bien de unos pocos sino de todos: «es el alimento del alma».

Una vez acabado el acto, los principales galardonados manifestaron su satisfacción por haber recibido tal reconocimiento. El diseñador de moda Lorenzo Caprile se declaró «orgulloso» por recibir esta medalla. «Y sobre todo compartirlo con mi equipo, que está en Madrid viéndome. Los que nos dedicamos al trapo si no tenemos un equipo bueno detrás no seríamos nadie».

También Tomatito se declaró lleno de orgullo. «Después de tantos años de carrera que te den premios y sigan dándote premios para mí es lo máximo». El tocaor agregó que «la música lo que hace es amistad» y destacó la importancia de que «la cultura una a los pueblos».

La actriz y directora teatral Magüi Mira dijo sentirse emocionada: «Todo lo que sea sembrar cultura en este lugar del mundo, en este país, como es España... somos unos privilegiados». Apuntó igualmente que «la única manera de seguir creciendo y de no sólo ser uno de los lugares más antiguos de Europa, sino los más punteros, los más contemporáneos, los más justos sólo lo vamos a conseguir con la cultura».

El Juli también se mostró contento por este reconocimiento: «Es muy importante y no sólo es a mi trayectoria, también al mundo de la tauromaquia. Me hace sentir orgulloso de una profesión a la que amo, vivo para ella. Es una gran felicidad y una gran noticia para el mundo del toro». «El mundo del arte, de la cultura, forma parte de nuestro patrimonio, de nuestra identidad como país y sociedad y nos debemos sentir orgullosos», explicó el matador, destacando que España «es un país en el que hay grandiosos artistas y nosotros, cada uno en nuestro mundo, tenemos la responsabilidad de trasladarlo a todos lados y que la gente se pueda enriquecer de las cosas tan maravillosas que hemos creado».

También emocionado se mostró el bailarín y coreógrafo Rafael Amargo, que reconoció que el acto fue«muy emotivo», valorando también las palabras del Rey y destacando a «los grandes profesionales» premiados.

Coronado, que en 2013 recibió el Premio Málaga del Festival de Cine Español, también expresó su satisfacción y aseguró estar convencido de que el responsable de Cultura, Íñigo Méndez de Vigo, bajará el IVA del sector cinematográfico. Dijo que en su discurso no quiso entrar en detalles sobre este asunto porque, según admitió, «no era el momento» y declaró que el ministro «está haciendo un gran trabajo y este año va a ser un año de alegría para el cine español». Sobre su salud, después de que el pasado año sufriera un infarto, reconoció estar «fenomenal»: «Lo que hay que hacer cuando ocurre algo así es ser consciente de lo que te ha pasado, cuidarte, hacer tu deporte, ir para adelante y sonreír».

Los malagueños que aguardaban a las puertas del Pompidou pudieron saludar a don Felipe y doña Letizia una vez finalizada la ceremonia. Pasadas las 13.30 horas, sus majestades salieron de la pinacoteca, donde cientos de ciudadanos les esperaban para hacerse fotos y vitorearles. Primero doña Letizia y, posteriormente, don Felipe, dieron la mano uno a uno a los malagueños allí congregados.