Así, el ICC-ICO descendió 4,7 puntos respecto a mayo y se situó en 51,7 puntos, debido, principalmente a la opinión de los encuestados respecto a la situación actual, mientras que las perspectivas para los próximos meses son algo mejores.

Según el ICO, el deterioro de la confianza de los consumidores en los últimos meses refleja el actual momento económico de incertidumbre derivado de la crisis financiera y el encarecimiento del crudo, que está traduciéndose en un aumento de los tipos de interés, de la tasa inflación y un menor dinamismo de la actividad económica.