El parqué madrileño cerró la sesión con una caída del 3,32%, la cuarta mayor caída del año, que situó al Ibex 35 en el nivel de los 10.008,6 puntos, arrastrado por el deseo de los inversores de recoger beneficios tras la subida histórica de ayer.

La euforia que se desató ayer en los mercados fue una reacción anormal y hoy el selectivo vivió una jornada de ajuste, en la que llegó a perder casi un 6%, aunque finalmente moderó su descenso y pudo salvar el nivel psicológico de los 10.000 puntos.

Los mayores descensos correspondieron a la banca y el sector de la construcción. En concreto, Sacyr Vallehermoso perdió un 5,41%, seguido de Bankinter (-4,48%), Banco Popular (-4,42%), Banco Sabadell (-4,03%), Mapfre (-3,94%), Telefónica (-3,69%), Banco Santander (-3,33%), BBVA (-3,06%), Iberdrola (-2,74%), Banesto (-1,63%) y Repsol YPF (-1,38%).

Los expertos aseguran que la fuerte volatilidad que azota a las principales plazas internacionales provoca oscilaciones muy fuertes en el mercado entre las diferentes sesiones, aunque también advierten que determinados movimientos, como el 'cierre de cortos', contribuyen a elevar la volatilidad.

Asimismo, advierten de que, aunque el plan de la UE aprobado el fin de semana ha dotado de tranquilidad al mercado, la incertidumbre aún no ha desaparecido del todo.