El 86 por ciento de los españoles cree que el Gobierno no ha actuado de forma eficaz para combatir la crisis económica y financiera, frente al 10 por ciento que considera que ha respondido de forma adecuada a las turbulencias. Los ciudadanos de España son, junto con los de Eslovenia y Letonia, los más descontentos de la UE con el papel de su Gobierno durante la crisis, según una encuesta del Eurobarómetro publicada este miércoles por la Comisión Europea.

En el conjunto de la UE, el 74 por ciento de los encuestados desaprueba la gestión de sus respectivos Gobiernos nacionales. Los países cuyas autoridades merecen menos opiniones negativas son Suecia (17 por ciento), Luxemburgo (26 por ciento) y Alemania (30 por ciento), donde el 65 por ciento de los ciudadanos respalda la actuación frente a la crisis de la canciller, Angela Merkel.

Entre los grandes países de la UE, el 31por ciento de los franceses aprueba la respuesta de Nicolas Sarkozy, frente al 62 por ciento que la critica. En Reino Unido los porcentajes son del 44 por ciento y 48 por ciento, respectivamente; y en Italia del 37 por ciento y 57 por ciento.

En cuanto a los Estados miembros más afectados por las turbulencias, el 83 por ciento de los griegos censura la gestión de su Gobierno, que cuenta con el apoyo del 16 por ciento de la población. En Irlanda, la proporción es del 83 por ciento de rechazo frente a sólo el 9 por ciento de apoyo, mientras que en Portugal la opinión se divide entre el 67 por ciento en contra y el 24 por ciento a favor del Ejecutivo.

Los españoles se encuentran también entre los que más critican la ineficacia de la UE frente a la crisis (58 por ciento), por delante incluso de los británicos (54 por ciento) y de los franceses (51 por ciento). La clasificación la encabezan los griegos (71 por ciento), que debieron esperar durante meses la ayuda de la UE por el bloqueo de Alemania.

El 58 por ciento de los españoles considera que lo peor de la crisis todavía está por venir, frente al 35 por ciento que cree que su impacto en materia de empleo ya ha alcanzado su pico. Los españoles son más pesimistas que la media comunitaria, ya que el 42 por ciento de los europeos dice que lo peor ha pasado.