El Gobierno británico anunció hoy que bajará del 50 al 45 por ciento a partir de abril de 2013 la carga fiscal sobre las rentas más altas, al tiempo que beneficiará a las personas con menos ingresos al elevar el umbral en que empezarán a pagar impuestos.

El ministro de Economía, George Osborne, anunció estos cambios de política fiscal al presentar ante el Parlamento el presupuesto del Estado para el ejercicio fiscal 2012-13, en el que, dijo, se da prioridad a "la estabilidad" y "competitividad".

En este sentido, propuso también un recorte hasta el 24 por ciento a partir del próximo abril del impuesto de sociedades, que grava los beneficios de las empresas, con la intención de dejarlo en un 22 por ciento en 2014.