El vicepresidente de la CEOE y presidente de CEIM, Arturo Fernández, ha considerado hoy que la organización no pierde "en absoluto" legitimidad por la "incidencia" de la detención de su expresidente Gerardo Díaz Ferrán, con el que ha negado haber tenido ningún tipo de negocio.

En declaraciones a la prensa tras asistir a un desayuno de Forum Europa con el comisario europeo de Empleo, Laszlo Andor, y la ministra de Empleo, Fátima Báñez, Fernández ha reconocido que en la organización ha "sorprendido" la detención por presunto alzamiento de bienes del fundador de Viajes Marsans.

"Claro que nos ha sorprendido, por supuesto", ha admitido Arturo Fernández, que ha negado que a la organización se le esté pidiendo ninguna información o que él mismo haya tenido ningún tipo de negocio con el detenido.

"Le conozco hace mucho tiempo y no tiene por qué pedirme ningún dinero. O sea que no, no, eso es lo que dice la prensa. Yo no he tenido ningún negocio con Díaz Ferrán", ha respondido al ser preguntado por si le prestó alguna cantidad.

Fernández ha insistido en que será la justicia la que deberá determinar la implicación de Díaz Ferrán en cualquier hecho delictivo, y en que él no puede decir si el ex presidente de la patronal "ha hecho bien las cosas o le han ido mal los negocios o le han ido bien".

En cuanto a la imagen de la organización, ha insistido en que ha tenido distintos presidentes "y en este caso ha habido esta incidencia con el señor Díaz Ferrán", pero la CEOE "no tiene porqué verse perjudicada en absoluto" ni tampoco pierde "en absoluto" legitimidad.

Preguntado por la posibilidad de que el ahora detenido mantuviese un alto tren de vida a pesar de sus numerosas deudas, ha asegurado que ese es "su problema", ha insistido en que fue "presidente de la CEOE y punto" y en que "la justicia deberá dirimir responsabilidades".