La riqueza financiera neta de las familias españolas alcanzó los 1.218.513 millones de euros en el tercer trimestre de 2015, lo que supone una caída del 2% respecto al trimestre precedente, el primer descenso trimestral desde el último trimestre de 2014 y el segundo desde finales de 2012. En tasa interanual, aumentó un 0,97%.

No obstante, el avance de la riqueza de los hogares respecto al año pasado se ha ralentizado considerablemente, puesto que el crecimiento interanual alcanzó el 13,1% en el primer trimestre y el 3,1% en el segundo trimestre.

En cualquier caso, la riqueza de los hogares se mantiene por encima de los niveles previos a la crisis económica, ya que en el primer semestre de 2007, justo antes del comienzo de la recesión económica, rozaba el billón de euros. Esto pone de manifiesto que las familias se están desendeudando y que han aprovechado los años de crisis para reducir su deuda y elevar su riqueza.