El Gobierno destinará un total de 18.318 millones de euros al pago de prestaciones por desempleo este año, lo que representa un 6,6% menos en comparación con el presupuesto de 2016, cuando se asignó a esta partida algo más de 19.000 millones de euros, según consta en el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2017.

En el libro amarillo de los Presupuestos, el Gobierno explica que de estos 18.318 millones de euros, un total de 18.027 millones se dedicarán al pago de prestaciones y el resto a gastos de funcionamiento.

El Ejecutivo subraya que los programas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) verán este año recortado su presupuesto un 3,9%, hasta los 23.994 millones de euros, por la "continua reducción del desempleo" motivada por la mejora de la economía y del mercado laboral.

De esos 23.994 millones de euros, el 98,4% del total (23.618 millones) lo constituyen las transferencias corrientes, destinadas al pago de las prestaciones por desempleo y a políticas activas de fomento del empleo.

El Gobierno estima que las prestaciones por desempleo contributivas supondrán 10.982 millones de euros este año; los subsidios por desempleo unos 4.569 millones de euros; el subsidio SEASS unos 622 millones; la renta activa de inserción implicará un gasto de 1.075 millones de euros; la garantía juvenil de 500 millones de euros, y la ayuda de 426 euros para el Programa de Activación para el Empleo (PAE) contará con una dotación de 280 millones de euros.