La nadadora Mireia Belmonte se ha convertido este viernes en leyenda del deporte español gracias a la segunda medalla de plata que consiguió en el Centro Acuático de Londres, donde despojó de complejos a la natación española, y donde escribió su nombre en los libros de historia por la doble hazaña.

Belmonte se colocó a la altura de David Cal, cuádruple medallista y el único atleta nacional capaz de sumar dos preseas en una misma cita olímpica. La de Badalona, que no tiene techo, igualó al gallego, un fijo en el medallero español en las últimas citas.

La catalana, a sus 21 primaveras, acapara dos de las tres medallas que atesora España por el momento y ejecutó a la perfección una carrera muy inteligente. Lejos de las mejores en un principio, Mireia creció a medida que avanzó la prueba para dar la estocada final en los 200 metros finales.

Belmonte nadó por debajo del récord de España y desde el principio se vio a una nadadora con hambre de medalla. Después de ir transitando entre la cuarta y quinta posición, Belmonte se aprovechó del cansancio de la danesa Lotte Friis para darle caza y entrar en la lucha por el podio.

En la recta final, la española dejó atrás a la británica Rebecca Adlington y a la neozelandesa Lauren Boyle para lanzarse a por la plata. Tan sólo veía por delante a una inalcanzable Katie Ledecky. La estadounidense, de tan sólo 15 años, sorprendió con los 8:16:63 segundos que tardó en hacerse con el oro. Mireia finalizó la prueba en 8:18:76 y la británica Rebecca Adlington, con una marca de 8:20:32, se llevó el bronce.