El concejal del área de Comercio, Manuel Aguilar, ha presentado este lunes la ordenanza municipal elaborada por el Ayuntamiento de Estepona para regular con carácter general el comercio ambulante en la vía pública; esto es, es el que se realiza fuera de establecimiento comercial permanente, con empleo de instalaciones desmontables, transportables o móviles. En este sentido, existen dos modalidades: el comercio en mercadillos que se celebren regularmente y el comercio callejero, entendiéndose por tal el que se celebre en vías públicas, quedando excluido de esta normativa el comercio en mercados ocasionales, que tiene lugar con motivo de fiestas, ferias o acontecimientos populares.

El edil ha destacado que con esta iniciativa se pretende dar seguridad jurídica a comerciantes, usuarios y al Ayuntamiento; así como eliminar la discrecionalidad que hasta ahora ha existido a la hora de otorgar licencias y puestos de comercio ambulante, fijando los criterios establecidos para ello.

El concejal se ha referido a la necesidad de adaptación de la normativa municipal existente sobre este ámbito, que data de 1997, ya que ésta no está adecuada a la regulación estatal y autonómica que posteriormente se ha elaborado sobre esta materia. La nueva norma municipal se someterá a aprobación inicial en la sesión de pleno ordinario de este mes. Aguilar ha apuntado que el equipo de gobierno ha elaborado ya tres ordenanzas para acabar con la falta de regulación municipal que existía en el sector comercial, con el convencimiento de que hay que normalizar las relaciones entre los ciudadanos y la administración para que éstas funcionen mejor.

El responsable del área de Comercio ha destacado además que con esta norma se pretende proteger al comercio local de "posibles competencias desleales", estableciendo que el comercio callejero no se podrá realizar en las cercanías de un establecimiento que expenda, con las debidas licencias, los artículos para los que el comerciante está autorizado, debiendo en estos caso guardar una distancia mínima de 25 metros respecto a dicho establecimiento. "Los comerciantes se quejaban de estas prácticas extendidas y que iban en contra de sus intereses y es evidente que hay que apoyar a al sector comercial, sobre todo, en la situación en la que nos encontramos", ha agregado.

La ordenanza regula además los requisitos para obtener permisos de autorizaciones, la forma de adjudicación y los requisitos que tienen que cumplir los interesados; así como el régimen sancionador por incumplimientos. De forma que será precisa la autorización previa del Ayuntamiento, conforme al procedimiento de concesión recogido en la presente ordenanza, sin la cual no podrá ejercerse el comercio ambulante.

Además el documento que se someterá a aprobación establece que deberán cumplir los siguientes requisitos: Respetar las condiciones exigidas en la normativa reguladora de los productos objeto de comercio, en especial de aquellos destinados a alimentación; tener expuestos al público, en lugar visible, las placas identificativas y los precios de venta de las mercancías; tener a disposición de la autoridad competente las facturas y comprobantes de compra de los productos objeto de comercio; tener a disposición de consumidores las hojas de quejas y reclamaciones, de acuerdo con el modelo reglamentariamente establecido.

En relación al tradicional mercadillo de los miércoles que se instala en el recinto ferial, el concejal adscrito al área de Comercio, José Antonio Vílchez, ha apuntado que la ordenanza pretende poner orden en este recinto y ha avanzado la intención del Consistorio de -al margen de las medidas que se incluyen en la ordenanza- llevar a cabo la reorganización de esta zona para mejorar y facilitar a los usuarios las compras en este recinto.

Vílchez ha señalado que también se regulará la concesión y adjudicación de los puestos de los comerciantes, regulando las dimensiones de estos puestos y el espacio que debe existir entre ellos; así como los requisitos de seguridad, higiene y salubridad, entre otros aspectos, que deben cumplir estos espacios. El Ayuntamiento se encargará de revisar el estado de limpieza de los emplazamientos y, en su caso, se procederá a retirar los residuos a costa del comerciante que hubiera incumplido su obligación.