Una comedia dramática de corte costumbrista. Así define a su retoño, Historias de Lavapiés, Ramón Luque, director del filme. Luque estuvo acompañado por parte del equipo que ha trabajado en la película -que se estrenó anoche en una sesión especial del certamen-: el productor y compositor de la banda sonora, Antonio Meliveo, y los actores Sandra Collantes, Rafael Reaño, Lida Cardona, Enrique Asenjo, Ramón García de Pomar y Lisi Linder. Solo faltó Willy Toledo, el protagonista de la cinta.

Los problemas y las vidas cotidianas de gente común. Ese es el argumento de esta película ambientada en el barrio madrileño de Lavapiés, pero que podría ubicarse en cualquier otro lugar. «Vivo en en el barrio de La Malagueta. Si haces Lavapiés más pequeño y le pones una playa, es mi barrio», asegura el productor malagueño Antonio Meliveo. La elección de Lavapiés no es casualidad. El barrio es un «sitio precioso y terrible a la vez» en palabras del director, Ramón Luque. El objetivo de la cinta es mostrar los problemas diarios de los ciudadanos. La pobreza, la inmigración, la educación... Son temas que están presentes en la vida de todos. También se ve la supervivencia: «La gente que acuda a verla se va a sentir identificada con la historia, sobre todos aquellos que están sobreviviendo», aseguró Luque. No obstante, el director siempre queda dejar claro que hay lugar para que las cosas mejoren: «Es una película de denuncia social, pero no panfletaria. Quiero que sea una ventana abierta a la esperanza», declaró.

Una vez presentada la criatura en sociedad, sus responsables esperan seguir recorriendo festivales con ella debajo del brazo. Ya tienen previsto distribuir la cinta durante este año y pasearla por múltiples certámenes tanto nacionales e internacionales.