El thriller peruano Perro guardián fue uno de los argumentos ayer de Territorio Latinoamericano. La cinta nos sumerge en la vida de El Perro, un exmilitar amnistiado por el Gobierno que trabaja como sicario. Un personaje complejo y atormentado, un tanto similar al Lèon de Luc Besson aunque Higasshionna y Caravedo, los directores, no logran un rol tan cerrado y perfecto. Quizás por defecto profesional: ambos realizadores provienen del mundo de los spots y los videoclips, lenguajes claros y directos, cuando esta historia lo que pedía era menos inmediatez y más reposo en el dibujo de los caracteres. La sensación general es la de que tenían algo muy bueno entre manos pero que se perdió por el camino por una historia que flaquea por momentos y unos personajes forzados, como el interpretado por Mayra Goñi, que nunca llegan a romper.

A pesar de estos (importantes) peros, Perro guardián es una película muy recomendable, resulta divertida y para mí, lo más importante y quizás la razón por la que pueda obviar o minimizar sus defectos, el trabajo técnico es simplemente fabuloso, con una fotografía digna de elogios. Así que digamos que esto es un sí pero con la boca pequeña. En cualquier caso, me alegra que el cine peruano esté creciendo y sacando a la luz producciones tan profesionales como ésta.

Perro guardián Dirección: D. Higashionna y B. Caravedo