Los actores Javier Zurita y Toni Martínez forman parte del elenco de una de las obras que más va a dar de hablar este Festival Contigo no, bicho. Entre ellos surge una química especial capaz de conservar las sensaciones aún vivas que nacieron en el rodaje. La perspectiva de estos dos profesionales de lo audiovisual nos muestra una visión del filme teeniger del año más madura y profesional.

¿Qué ha significado para ustedes trabajar en Contigo no, bicho?Javier Zurita:

Un ambiente de rodaje en el que podías encontrarte a gente de todas las edades trabajando alrededor de una misma idea: «Hacer reír a los más jóvenes». Porque ésta es una película que tienen que ver todos los jóvenes sin sus padres; una gamberrada que evoca a un tipo de cine inexistente y necesario en la cartelera.

Toni Martínez: A mí me hablaron del proyecto hace más de dos años; de hecho, fui el primer actor que estuvo en el reparto desde los orígenes. Estaba un poco desencantado con la profesión en ese momento pero cuando me contaron el proyecto no dudé en subirme a él y contagiarme de toda esa energía que se estaba creando alrededor. La madurez te hace ver la vida con otra perspectiva y Contigo no, bicho me hizo recuperar una energía que ya daba por perdida.

La película recupera un cine atrevido y gamberro de los ochenta. ¿Ésa era la idea original?JZ:

Sí, y todos han sido muy generosos. Sabíamos a lo que nos enfrentábamos haciendo este trabajo. Se ha creado una camaradería con todo el reparto inquebrantable; de hecho, allá donde vamos nos juntamos siendo capaces de reunir a más de veinticinco personas. Ese concepto de la amistad aún desprovista de una cierta mirada madura hace que la obra sea fresca y empática con el público al que va dirigido.

TM: Es una obra coral, muy atenta al contexto histórico que estamos viviendo cara al público. De hecho, está muy ligada a las redes sociales, tanto en la banda sonora como en la elección del reparto. Todo en esta película ha sido meticulosamente preparado sin otra pretensión que hacer reír a todos los jóvenes. La idea era trabajar en una historia donde lo más importante fueran esas cosas que en la madurez se van diluyendo, como la amistad, la camaradería y el compromiso en tus convicciones, por muy discutibles que sean.

JZ: La búsqueda del sexo y todo lo que ocurre alrededor en la película es importante, no solo porque es el leit motiv de la historia sino porque es una excusa para crear inconscientemente momentos únicos que serán recordados con el paso del tiempo con nostalgia.

TM: Si unes esos momentos sale tu personalidad.

Algo que llama en la atención de la película es que parece haber dado suerte a todo el que ha estado implicado en ella. ¿Cómo ha sido su carrera tras el rodaje?JZ:

Todo bien. Trabajamos más y mejor. No podemos quejarnos. Yo particularmente he rodado fuera de España dos proyectos, y acabo de terminar un corto sobre el bullying, el corto más profesional en el que he trabajado hasta el momento. Estoy convencido de que muchos de estos trabajos se verán pronto, al igual que la película que presento en la sección del Festival 5 Minutos de Cine: Este amor es de otro planeta, dirigida por Daniel Diosdado y protagonizadapor Kaco Fons y Elena Martínez, entre otros, en la que hago por fin un papel cómico.

TM: La energía de Contigo... sigue latente, que el millennial salga de Youtube y vaya al cine. Yo estoy preparando en un musical, estoy a punto de cerrar una producción internacional, sigo con la radio y además tengo media docena de proyectos de los que no puedo hablar. Todo esto tiene algo que ver con la película. Hay que conseguir que la gente joven vuelva a ver el cine como algo único y especial como lo hemos vivido otras generaciones. Esperemos que la película tenga éxito.