Doble aliciente el que ofrece este año la Corrida Picassiana con un mano a mano entre Enrique Ponce y Javier Conde. Al margen de los propios alicientes de cualquier corrida de toros, en este caso la plaza se transforma con la figura de Pablo Picasso como referencia principal.
Por cuarto año consecutivo, el artista francés afincado en nuestra provincia Laurent Pallatier Loren será el encargado de crear la escenografía de este espectáculo, que cada año es más cuidada y que ha pasado por diferentes tonalidades como el rosa, el azul o el blanco de 2016. La nueva empresa Toros del Mediterráneo ha entendido que su labor resulta fundamental para mantener la esencia de esta corrida y ha vuelto a contar con su participación para hacer que, de un día a otro, cambie totalmente el aspecto de la plaza.
Este año, además, se va a ofrecer en esta corrida el espectáculo Crisol, una idea original del propio Enrique Ponce que tiene como objetivo fundamental la fusión de la tauromaquia con la música clásica, por lo que se contará con la presencia de una banda sinfónica que aportará la banda sonora de la corrida, aunque sin perder la esencia tradicional. Se cuenta también con el aliciente de que sea el estreno mundial de Crisol tras un avance el pasado año en la plaza francesa de Istres.
Toreros
En lo que se refiere a los toreros, Enrique Ponce es uno de los diestros predilectos de la afición malagueña, que cada año le reclaman y aclaman en sus faenas. Nunca falla a su cita de Málaga, y en La Malagueta se han desarrollado algunas de las faenas más importantes de su ya dilatada carrera.
Javier Conde, por su parte, es un torero que desata pasiones en Málaga. Para bueno o para malo, no deja a nadie indiferente, y es capaz de cambiar la bronca por la pasión con un muletazo. Esa relación se ha visto interrumpida en las dos últimas temporadas, en las que el ex empresario José Cutiño no contó con la presencia del que también fuera gestor del coso en la etapa de Fernando Puche. En estos años se han visto reducidos los paseíllos realizados por el malagueño, que en esta campaña está teniendo algo más de continuidad en España y también en el continente americano.
Este mano a mano va a ser también muy emotivo en el aspecto sentimental para los dos actuantes, que cuentan con una estrecha relación personal desde hace muchos años, lo que seguramente se notará sobre el albero del coso de Réding.
