El juez Jonathan Silbert, en el Tribunal Superior de New Haven, celebró hoy una breve vista en la que dio luz verde para que las parejas homosexuales puedan recoger los formularios oficiales que permiten contraer matrimonio en esa ciudad y el resto del estado.

El Tribunal Supremo de Connecticut determinó el pasado 10 de octubre que las parejas del mismo sexo tenían derecho a contraer matrimonio, una decisión respaldada por cuatro de sus magistrados, mientras que los otros tres se pronunciaron en contra.

La decisión del magistrado Silbert supone que desde hoy mismo ese estado puede celebrar matrimonios entre parejas del mismo sexo, algo que, según la prensa estatal, ya tienen previsto algunas de ellas.

Según las autoridades de ese estado, el número de licencias de uniones civiles entre personas del mismo sexo emitidas entre octubre de 2005 y el pasado julio se situaron algo por encima de las dos mil.

La orden del magistrado para que en todo el estado estén disponibles esas licencias de matrimonios para los gays y lesbianas que lo soliciten convierte a Connecticut en el segundo estado, después de Massachusetts, en celebrar esos matrimonios.

En 2005 Connecticut adoptó una ley que permitía las uniones civiles, que sigue en vigencia y que otorga a las personas que opten por ellas tener los mismos derechos que las parejas casadas.

California era, hasta el pasado 4 de noviembre, el tercer estado de Estados Unidos en permitir esos matrimonios, pero en los comicios de ese día los californianos aprobaron la propuesta, conocida como "Proposition 8", que supuso el fin de la legalidad de ese tipo de unión.

En la actualidad, el Tribunal Supremo de California tiene pendientes varios juicios en los que los demandantes piden que anule esa votación.

En otros estados del país, como Arizona y Florida sus legislaciones estatales han aprobado enmiendas constitucionales para prohibir los matrimonios entre homosexuales.

La decisión de los californianos ha llevado a que numerosos grupos defensores de los derechos de los homosexuales hayan convocado protestas y manifestaciones reclamando el derecho a poder casarse.

Para el sábado, varias organizaciones civiles han convocado una manifestación nacional en Nueva York, Washington, Miami, Los Angeles, San Francisco y otras ciudades del país para reclamar ese derecho.