El cartel de la temporada taurina de 2010 en la Real Maestranza de Caballería de Sevilla tiene un aire antequerano. Y es que su autor, el prestigioso pintor hispalense afincado en Madrid Luis Gordillo, se ha inspirado en un festejo celebrado en el coso taurino de esta localidad para realizar la obra que servirá para anunciar todas las corridas de toros que se celebren durante el año que a punto está de comenzar.

La presentación tuvo lugar el pasado martes, en el transcurso de un acto en el que junto al artista estuvieron presentes el teniente hermano mayor de la Maestranza, Alfonso Guajardo-Fajardo, y el empresario Eduardo Canorea. Allí se mostró por primera vez el cartel, compuesto por un ´collage´ que nos acerca al estilo abstracto de buena parte de la obra de Gordillo, que atesora a lo largo de su dilatada carrera prestigiosos galardones como el Premio Nacional de las Artes Plásticas en 1981 o, más recientemente, el Premio Velázquez de Artes Plásticas, el equivalente en pintura al Premio Cervantes, del año 2007.

La casualidad quiso que la plaza de toros de Antequera quedara plasmada en el cartel, a pesar de que tras su remodelación integral, acometida a partir del año 1983, presenta notables paralelismos con el coso maestrante, principalmente en lo que se refiere a su arcada logiada, de columnas toscanas de piedra caliza blanca y arcos de medio punto.

Una vez recibido el encargo por parte de la Real Maestranza, el autor sintió la inspiración al contemplar una corrida de toros por televisión. Era el 22 de agosto y al encender el televisor de encontró con la Corrida Goyesca celebrada con motivo de la Real Feria de Agosto de la Ciudad del Torcal. En ese instante comenzó a fotografiar la pantalla, sin saber que en esos momentos toreaban Manuel Jesús ´El Cid´ y Julián López ´El Juli´, los dos diestros que aparecen reflejados. También hacía el paseíllo esa tarde José Antonio ´Morante de la Puebla´, pero ninguna instantánea de sus faenas aparecen reflejadas.

A partir de esas fotografías del propio Luis Gordillo, que confesó que no es aficionado a los toros y ni tan siquiera sabía que el protagonismo del cartel se lo estaba dando a una de las grandes figuras sevillanas del momento como es El Cid, construyó la composición que posteriormente ha sido llevada al lienzo y que finalmente ha conformado el cartel sevillano para la temporada de 2010. Esta idea fue la que llevó a cabo y la que aparecerá en la cartelería y en el billetaje de la plaza, en lugar de su proyecto original, el de plasmar a un hombre con cuernos; una propuesta demasiado atrevida que finalmente no se decidió a acometer al no saber las reacciones que podría suscitar.