Un comité parlamentario californiano dio el visto bueno hoy a una iniciativa de ley que persigue legalizar en ese estado la comercialización de la marihuana, que de esta forma pasaría a ser un bien de consumo como el alcohol y el tabaco.

Se trata de un primer paso hacia un posible debate y votación en el Congreso de California, donde la propuesta, conocida como AB390, llegaría después de someterse al escrutinio del Comité de Salud de la Cámara Baja.

La iniciativa legal se puso en marcha hoy con su aprobación en el seno del Comité de Seguridad Pública del Congreso, donde salió adelante con los votos de 4 de sus siete miembros con el argumento de que la legalización de la marihuana supondría una importante fuente de ingresos para las arcas estatales.

De progresar, la AB390 autorizará a las personas mayores de 21 años, edad legal para comprar tabaco y alcohol, la posesión, venta y cultivo de marihuana bajo una tasa de 50 dólares por cada 30 gramos de esta droga, lo que se estima produciría un incremento de la recaudación pública de alrededor de 1.300 millones de dólares anuales.

La iniciativa, no obstante, tendría que ser presentada antes del viernes ante el Comité de Salud para cumplir con sus plazos de tramitación, un margen de tiempo muy estrecho que, en caso de no cumplirse, obligará a reintroducir la propuesta este año desde el principio.

Legal si hay problemas de salud

Desde 1996, la marihuana se dispensa legalmente en California bajo prescripción médica si bien desde entonces han proliferado los locales que distribuyen de forma autorizada esta droga y cursan licencias para el consumo por motivos de salud.

Según el Departamento de Justicia de EE.UU. el asumir que el uso de marihuana en California se restringe a pacientes graves es algo "engañoso", según se recoge en su web donde se muestra que casi el 40 por ciento de los consumidores legales alegan padecer "desórdenes de humor" u otros problemas similares, el mismo porcentaje que los que emplean la sustancia para tratarse de "dolóres crónicos".