Después de cincuenta y cuatro años, la plaza Ochavada de Archidona va a recuperar su actividad taurina. Este emblema del barroco andaluz acogerá de este modo el próximo viernes 23 de julio una corrida de toros coincidiendo con el retorno del Ayuntamiento de esta localidad al enclave que ocupara entre los siglos XVIII y XIX, en las dependencias del edificio que posteriormente fue Colegio Menor.

Estas balconadas serán precisamente protagonistas de la corrida, ya que ellas acogerán a la presidencia, la banda de música y diferentes personalidades que serán invitadas a una corrida que podrá ser presenciada por todos los andaluces a través de las cámaras de la televisión autonómica. Los empresarios Antonio y Juan Carlos Dorado, con la colaboración del consistorio archidonés, van a hacer posible esta recuperación. El cartel también pretende estar a la altura del marco, para lo que ya está asegurada la presencia de Curro Díaz y Salvador Vega. El diestro malagueño está además muy vinculado a esta localidad, en la que pasa largas temporadas durante su preparación invernal. En los próximos días se completará la terna con un tercer espada que también podría ser de la provincia. Por su parte, las reses a lidiar corresponderán a la ganadería de Lagunajanda.

No obstante, un proyecto de estas características no está exento de problemas, fundamentalmente por no contar la plaza Ochavada con el diámetro mínimo para instalar en su interior un coso portátil; por lo que se deberán realizar adecuaciones en las que ya trabaja el aparejador malagueño Juan Manuel del Pozo, reconocido aficionado a su vez. La eliminación hace unos años de la fuente que se situaba en el centro de la ochava facilita la realización de este espectáculo taurino, pese a lo que deberá instalarse unos tendidos efímeros y un callejón que cumpla con las exigencias de la reglamentación andaluza. Para lograrlo se han visitado otras plazas históricas en las que se celebran corridas de toros, como la valenciana de Algemesí, de las que se recabarán ideas para llevarlas a cabo en este municipio del norte de la provincia de Málaga.

Después de «varios años intentándolo», según reconoció ayer a este medio el empresario Antonio Dorado, por fin ahora se han dado las circunstancias «para recuperar las corridas en un espacio que fue diseñado para eso». De hecho, la plaza cuenta con tres arcadas de entrada que podrían corresponderse con el patio de cuadrillas, la salida de las reses y caballos de picar, y la puerta grande con acceso del público. No obstante, por medidas de seguridad, está estructuración podría modificarse en la corrida del próximo mes de julio; albergando un número total de aficionados cercano al millar, aproximadamente. Eso sí, los propietarios del único edificio que no es municipal de la plaza tendrá libre visión desde sus privilegiados balcones.

La plaza Ochavada de Archidona constituye uno de los iconos emblemáticos de la localidad y un referente esencial en su vida social y cultural. Es una de las plazas más destacadas del barroco andaluz, edificada entre 1780 y 1786 por los maestros alarifes locales Francisco de Astorga Frías y Antonio González Sevillano. Junto a la presumible influencia de modelos franceses, hay que valorar como referentes las plazas octogonales de las nuevas localidades andaluzas de Sierra Morena de la época de Carlos III.

La plaza acogió casas particulares, tiendas y un mesón, así como la Casa Consistorial, cuyo inmueble ahora recuperado albergaría durante el siglo XX sucesivas escuelas públicas y un Colegio Manos. Desde su edificación, este espacio se ha convertido en escenario de algunos de los principales acontecimientos del municipio como la Semana Santa, más recientemente su Feria del Perro y, como no, las ahora recuperadas corridas de toros.