Sólo ha sido un día y las repercusiones ya se están notando, insisten los sindicatos policiales. Las colas que el pasado viernes se registraron en el Aeropuerto de Málaga debido a la huelga de celo convocada por los cinco grupos sindicales del cuerpo policial fueron las primeras, pero lo peor aún no ha llegado, advirtieron ayer los sindicatos policiales.

Están dispuestos a pelear hasta el final por la equiparación salarial con los cuerpos autonómicos -"la diferencia ya es de 7.000 euros anuales, el doble que hace unos años"- y para hoy y mañana están previstas nuevas jornadas de trabajo a reglamento, esto es, cumpliendo de forma exhaustiva el reglamento, no hacer servicios extraordinarios y actuar exclusivamente a demanda. Esta situación ha provocado que el pasado viernes, primer día de movilizaciones, el número de arrestados se redujera casi un 25% en la capital al pasar de las cuarenta detenciones que habitualmente se hace a diario a nueve.

"Queremos que quede claro que en ningún momento estas medidas van a afectar a la seguridad ciudadana, las demandas de los ciudadanos van a ser siempre atendidas, pero sí es cierto que va a afectar a determinados delitos ya que el policía no va a actuar por iniciativa propia, como suele hacerlo, sino que se limitará a cumplir las órdenes que reciba de sus superiores y, en el caso de las patrullas, de la sala del 091", explicó el representante del Sindicato Profesional de Policía (SPP), José Luis Fernández Torres.

Servicios. Según explicaron ayer los representantes sindicales de la provincial, los servicios que se verán más afectados por estas medidas de presión serán los de investigación policial, los de prevención durante el patrulleo y, especialmente, los de los puestos fronterizos (aduanas, aeropuertos, puertos...). "Esto puede repercutir, por ejemplo, en el número de asaltos a viviendas ya que los agentes de patrulla no pasarán por las zonas que, por experiencia, saben que son más problemáticas, sino que se limitarán a actuar en función de las denuncias ciudadanas, por poner un ejemplo", explicaron.

Déficit. Tampoco se harán servicios extraordinarios y esto se notará especialmente cuando la plantilla comience a irse de vacaciones ya que otros años se ha suplido el déficit de funcionarios con las horas extras. En ese sentido destacaron que el refuerzo de agentes anunciado por el Ministerio de Interior para la provincia malagueña no es tal: "Hay que tener en cuenta que de los cientos de agentes prometidos, un gran porcentaje son alumnos de aula abierta y policías en práctica. Los primeros no pueden ejercer la función policial y los segundos tienen que ir acompañados de un funcionario. Si restamos a los que están de vacaciones, a los que se han ido en comisión de servicio a Madrid y a la Expo de Zaragoza, resulta que el refuerzo real para este verano va a ser de ocho policías", denunciaron.

Ocho policías más para una población que, en los meses de verano, aumenta de forma vertiginosa. "Para cubrir las necesidades ciudadanas de Málaga serían necesarios, como mínimo, quinientos policías más", estimaron.

No obstante, se conformarían con que se cubrieran los doscientos que faltan para completar el actual catálogo de puestos de trabajo de Málaga porque "hay comisarías, como la de Estepona, Vélez y la provincial, que están en números críticos". Y es que, apuntan, la mejora del sueldo es una de las reivindicaciones, pero no la única para conseguir un cuerpo policial "moderno y eficaz".

De momento no han obtenido respuesta favorable del Ministerio del Interior, pero recurren a una frase que últimamente está de moda: "Podemos. No hay ninguna razón para que la policía más eficiente sea la peor pagada".