El director de la Agencia Española de Protección de Datos, Artemi Rallo, aseguró ayer en Ronda que la mayoría de las investigaciones que lleva a cabo este organismo se realizan previa denuncia de los ciudadanos por "prácticas irregulares" en la protección de sus señas personales. Rallo, que dio una conferencia sobre los cambios de la protección de datos en España y sus variaciones a lo largo de los años, sobre todo tras los atentados del 11-S y el 11-M, aseguró que cada año realizan más de 1.300 inspecciones a petición popular, por ciudadanos que aseguran haber sido víctimas de alguna práctica irregular.

El ponente centró su intervención en el marco de los Cursos de Verano de la Universidad de Málaga en la regulación de la protección de datos, el nuevo reglamento y otros aspectos relevantes de la materia.

Internet. "En el ámbito laboral es donde se están produciendo muchas prácticas que resultan intrusivas para la privacidad. En esto están muy presentes las nuevas tecnologías. Internet es un medio para mejorar y facilitar la convivencia y el desarrollo de la sociedad del conocimiento pero también para poner en jaque algunas de las reglas y principios básicos de la privacidad y de la protección de los datos de carácter personal", aseguró Rallo.

Todos los ciudadanos son usuarios, en términos mayoritarios, de correos electrónicos, motores de búsqueda... esas tecnologías son claves para el funcionamiento de la sociedad actual pero al mismo tiempo permiten y posibilitan registrar la información personal que supone identificar las páginas web a las que se accede o el registro de los propios datos de comunicaciones electrónicas. Frente a estas realidades hay mucho desconocimiento y es necesario un ejercicio de información para los usuarios, para que hagan un uso consciente de todos estos medios.

Junto a esto, otras prácticas como colgar vídeos en ´youtube´, que muchas veces no son consentidos por los que aparecen en ellos, o la reproducción de prácticas de acoso escolar, son actividades que deberían ser eliminadas y que intentan serlo por medio de la Agencia Española de Protección de Datos, aseguró Rallo en su alocución en los Cursos de Verano.

11-S. Además, añadió que desde los atentados del 11-S ha surgido una legislación "muy profusa" no sólo en EEUU sino también en Europa. En octubre del año pasado se aprobó la Ley de Retención de Datos de Localización y de Tráfico de Comunicaciones Electrónicas, que impone a los operadores de telecomunicaciones la conservación durante 12 meses de todos los datos de tráfico y localización, no los contenidos. Para Rallo "ésta es una más de las manifestaciones de esa nueva ola de limitación en pro de la seguridad". Pero no sólo las autoridades temen por sus ciudadanos y crean nuevas medidas de seguridad. Como muestra, las citadas 1.300 inspecciones realizadas cada año por la agencia, todas ellas a petición de los ciudadanos.