Estos parques son el de Sierra de las Nieves, que factura poco más de un millón de euros, y los Montes de Málaga, con un volumen de negocio de 369.000 euros, según los datos recogidos en el 'Informe anual del Turismo en Andalucía'.
A ellos hay que añadir Los Alcornocales y la Sierra de Grazalema, que comparten extensión con Cádiz, y que generan 10 y 6 millones respectivamente, y el parque de Sierra de Tejada, Almijara y Alhama, que ocupa parte de la provincia malagueña y de Granada y que factura 1,6 millones.
A nivel regional se generan al año más de 70 millones de euros, con más de 1.500 empresas instaladas en ellos que se dedican a la explotación de este sector.
El primer lugar lo ocupan Sierra Nevada (Granada) y la Sierra de Cazorla, Segura y Las Villas (Jaén), que facturan al año 11,3 millones de euros cada uno, por lo que entre los dos acaparan más del 30 por ciento del volumen de negocio total en la Comunidad Autónoma.
En segundo lugar están los parques de Los Alcornocales y la Sierra de Grazalema, y el de Cabo de Gata-Níjar (Almería), que tiene un volumen de negocio de 6 millones.
En cuanto a las empresas, que superan las 1.500 en total, dan empleo a unas 7.000 personas, casi la mitad de ellas aglutinadas en Sierra Nevada, Cazorla, Los Alcornocales y Grazalema.
El informe, elaborado por Analistas Económicos de Andalucía, reseña que el turismo se considera ya una "herramienta fundamental" para el desarrollo socioeconómico de las poblaciones que habitan en estos espacios naturales, pero por el contrario, aumenta el riesgo potencial de impactos negativos sobre la conservación de estos territorios.
Los parques naturales en los que tradicionalmente ha existido un mayor grado de desarrollo turístico son los diez cuya extensión supera las 50.000 hectáreas, además de Cabo de Gata-Níjar.
De hecho la capacidad de alojamiento turístico en los parques naturales andaluces alcanza las 59.000 camas, aunque casi el 70 por ciento de ellas se concentran en Los Alcornocales, Doñana, Cazorla y Sierra Nevada, por este orden.
La oferta hotelera desde 1996 ha crecido alrededor de un 300 por ciento, al pasar de 6.700 plazas a 27.000, mientras que en pensiones se superan las 7.500 plazas, en apartamentos las 5.500 y en recintos de acampada las 38.000.
Para Analistas Económicos de Andalucía los parques, respetando la legislación de protección, deben gestionarse también como destinos turísticos, reales o potenciales, por lo que los gestores medioambientales deben intervenir en su gestión.
