El Servicio de Emergencias 112, dependiente de la Consejería de Gobernación de la Junta de Andalucía, ha gestionado en la provincia de Málaga entre enero y noviembre de este año un total de 66.546 incidencias, lo que supone un 12,32 por ciento más que durante el mismo periodo de 2008, en el que se tramitaron 59.258 llamadas.
La delegada del Gobierno andaluz, María Gámez, destacó que este servicio es el principal al que los malagueños recurren cuando existe una emergencia. Así, explicó que en los 11 primeros meses de este año la mayoría de las llamadas estuvieron relacionadas con la asistencia sanitaria, concretamente 30.130, seguidas de las de seguridad ciudadana (14.310) y de otras tipologías (12.168).
Igualmente se gestionaron 5.330 llamadas relativas a accidentes de tráfico, 3.534 sobre incendios, 845 acerca de rescates y salvamentos y 221 relacionadas con riesgos naturales, según informó el Gobierno andaluz a través de un comunicado.
La ciudad de Málaga, como es habitual, es donde más incidencias se gestionaron; concretamente 25.995, lo que supone el 39,04 por ciento del total. En los municipios costeros hubo 29.198 llamadas a este servicio, mientras que en los del interior se gestionaron 11.389 incidencias.
Efectivos
El Sistema de Emergencias 112 Andalucía cuenta ya con un centenar de organismos incorporados a su sistema informático en el conjunto de la Comunidad Autónoma, de los que 17 pertenecen a la provincia de Málaga.
Así, en la provincia malagueña están integrados las policías locales y bomberos de ocho ayuntamientos: Málaga capital, Marbella, Estepona, Fuengirola, Antequera, Benalmádena, Vélez-Málaga y Nerja. Además, recientemente se ha integrado la Policía Nacional de Fuengirola.
El teléfono de emergencias 112 de la Junta es el encargado de atender las llamadas de la población y de activar a los efectivos necesarios para dar la oportuna respuesta de auxilio. Estos 100 organismos, al formar parte de la red informática del 112, pueden conocer en tiempo real las incidencias o emergencias que se producen y las alertas que se realizan a los distintos organismos que tienen que intervenir en cada situación, lo que permite mayor coordinación y eficiencia en la respuesta.
