El Ayuntamiento de Málaga ha escogido dos zonas de la capital, una en la barriada de El Torcal y otra en el Centro, para implantar por primera vez la denominada Zona-30. Se trata de áreas donde la prioridad la tendrá el peatón y los coches tendrán velocidad limitada a los 30 kilómetros por hora. El sistema lleva aparejado ganar espacios para el ciudadano con aceras más anchas y aparcamiento controlado.

En concreto la Zona-30 se aplicará en el Centro Histórico de la capital, en el cuadrado imperfecto cuyos lados forman las calles San Lorenzo, Duquesa de Parcent, Tomás de Heredia y Trinidad Grund, junto con las calles interiores que entrecruzan ese cuadrado: Pinzón, Martínez Campos, Barroso, Casas de Campos, Vendeja y Somera.

Actuaciones. La otra área donde se aplicará es en un sector de la barriada de El Torcal que comprende las calles avenida Manuel Torres, Niño de Gloria y Cayetano de Cabra.

La filosofía de estas Zonas-30 es escoger un barrio de la ciudad y mediante determinadas actuaciones convertirlo en un espacio de tráfico calmado dándole un carácter de barrio vecinal, donde el peatón se sienta dueño del espacio y donde la persona que conduce un vehículo sepa que transita por un barrio tranquilo.

Para ello el proyecto, que está incluido para su financiación en el Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local (Feesl) con un coste de 363.850 euros, contempla una serie de medidas que se ejecutarán en las áreas de entrada a estas zonas con la idea de anunciar que se está en un espacio de preferencia peatonal.

Así, en función de las calles se colocarán mesetas o bandas sonoras, vados, lomos, bolardos sobre aceras, estrechamiento de la calzada o recrecido de aceras, todo ello acompañado de las señales de tráfico y de aviso que hagan evidente la presencia de la Zona-30.

El objetivo del Ayuntamiento es seguir implantando estas Zonas-30 en otros lugares; de hecho ya está elaborado por parte del área de Movilidad un proyecto para cada uno de los distritos de la ciudad que se irá poniendo en ejecución en función de las disponibilidades económicas municipales.

Hasta ahora se habían tomado medidas de calmado del tráfico y de preferencia peatonal, pero sólo en calles determinadas.