La Fiscalía de Málaga solicita en sus conclusiones provisionales un total de cuarenta años de prisión para dos rumanos acusados de estrangular a un hombre con el que habían concertado una cita previa. Después, le robaron el vehículo y arrojaron su cuerpo desde un puente de la autovía A-7 a su paso por Estepona. Asimismo, la acusación pública reclama una indemnización de 200.000 euros para la familia del fallecido.

Según consta en la calificación fiscal, G. M. y L. M. D., "puestos previamente de común acuerdo, concertaron una cita con Luis M. M. S. en la madrugada del 29 de noviembre de 2005".

Una vez en el interior de la furgoneta del fenecido, "procedieron, con ánimo de causarle la muerte, a su estrangulación, utilizando para ello una bolsa de plástico con la que le cubrieron la cabeza".

Como consecuencia de ello, los acusados causaron presuntamente la muerte de Luis M. M. S., en concreto por "anoxia-anóxica encefálica", explica el fiscal.

Después, arrojaron el cuerpo de Luis desde el puente de la autovía A-7 ubicado en el punto kilométrico 150,10. El cadáver cayó en el paraje conocido como Arroyo Vaquero, ubicado en la localidad de Estepona.

Asimismo, los encausados, con ánimo de uso, "se apropiaron de la furgoneta propiedad de Luis, una Fiat modelo Escudo tasada pericialmente en 8.600 euros". Ésta fue hallada el 8 de diciembre en la salida de la autopista A-7 de la localidad de Silla (Palencia), lugar en el que la abandonaron los acusados en este caso.

Los hechos han sido calificados como un delito de homicidio del artículo 138 del Código Penal y un ilícito de robo de uso de vehículo a motor del 224.

Por el primer delito, el fiscal solicita quince años de prisión para cada procesado, mientras que también reclama otros cinco por el segundo tipo penal, amén de una indemnización de 200.000 euros para la familia del fallecido y el pago de las costas procesales.

Los hechos serán enjuiciados por el tribunal del jurado de la Audiencia Provincial de Málaga, mientras que el caso fue investigado por el juzgado de Instrucción número 3 de Estepona. Ambos acusados tenían antecedentes penales en su país de origen.